Este palacio fue por más de 100 años la residencia de reyes y es considerado uno de los lugares más trascendentales de Europa, y cuando lo visites tendrás la oportunidad de ver y apreciar cómo era la vida de algunos monarcas franceses que vivieron en el mismo.El palacio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, desde hace más de treinta años, y se caracteriza por su imponente arquitectura y su influyente importancia en la historia francesa.
El Palacio de Versalles es uno de los más visitados a nivel turístico, pero también es considerado un palacio nacional donde se reciben a jefes de Estado de otros países.
Que ver
Son tantas cosas por conocer, pero dentro de las más importantes se encuentra la enorme capilla y los Grandes Aposentos del Rey y la Reina, que poseen una gran cantidad de elementos decorativos.
Algo sorprende y de gran interés entre los visitantes esta la Galería de los Espejos, la cual es una impresionante galería de 73 metros de longitud que posee 375 espejos.
Muchos turistas tienden a visitar el palacio por cuenta propia, el cual está ubicado en el municipio de Versalles, en Île-de-France, pero para ahorrar tiempo y poder disfrutar de cada uno de sus puntos, lo más recomendable es hacerlo a través de los tour organizados, ya que el mismo te incluye transportes y guía, sobre todo en diferentes idiomas.
Sus jardines
Sus atractivos no solo se limitan a la comodidad y el lujo que el mismo presenta en su interior, sino que también tiene sus majestuosos jardines seductores que atraen a un gran número de visitantes.
Dentro de los puntos de interés que tiene se encuentra el Gran Trianón, un pequeño palacio de mármol rosa, o el Dominio de María Antonieta, lugar en el que la esposa de Luis XVI disfrutaba de una vida sencilla y campestre.
Historia
De acuerdo a la historia, Luis XIV fue el primero en transformar y ampliar el pabellón de caza de su padre, Luis XIII, donde instalaría la Corte y el gobierno en el año 1682. Desde entonces y hasta la llegada de la Revolución Francesa, diferentes monarcas se fueron sucediendo en el trono y continuaron embelleciendo el palacio.
En 1661 se iniciaron las obras para la creación de los Jardines de Versalles, que no se verían finalizadas hasta cuarenta años después. La construcción de los jardines fue un duro trabajo, ya que el terreno estaba ocupado por bosques y terreno pantanoso, por lo que se necesitó la ayuda de miles de hombres que se ocuparon de transportar tierra y todo tipo de árboles.
En 1789 el palacio dejó de funcionar como sede oficial del poder y posteriormente se convirtió en el Museo de la Historia de Francia.
Ropa cómoda, dependiendo del clima.Tenis, porque se camina bastante.Llegar temprano para evitar las largas filas. El precio de entrada es 15 euros y los lunes está cerrado.