Fernando León de Aranoa (Los lunes al sol, Princesas) se ha embarcado con Un día perfecto en su película más arriesgada en lo comercial, contando con los oscarizados Benicio del Toro y Tim Robbins, además de Mélanie Thierry y Olga Kurylenko.
El punto de partido de la película es lograr sacar un pesado cadáver de un pozo en una zona en conflicto de Kosovo. Para conseguirlo un grupo de cooperantes encabezados por Mambrú (Benicio del Toro) hará todo lo que esté en su mano. Pero por el camino aparecerán Nikola, un niño que solo quiere un balón de fútbol; y también Katya (Olga Kurylenko) una femme fatale que está allí para evaluar si hay que cerrar la misión porque allí ya no hacen falta.
En tiempo de guerra casi cualquier cosa vale y para sobrevivir hay que tener más ingenio que el mismísimo diablo. E ingenio no le falta al equipo de Mambrú y B (interpretado por Tim Robbins), que conseguirá salir ileso de situaciones tan peligrosas como la de un campo minado y además por el camino logrará hacernos reír a carcajadas.
Los horrores de la guerra se han contado de mil y una formas en la pantalla y en esta personalísima aproximación al conflicto de Kosovo León de Aranoa ha decidido hacerlo desde un punto de vista no tan evidente como el del conflicto armado, la barbarie o la brutalidad y para ello se ha valido de mucho sentido del humor. Aquellos que busquen una densa película sobre la guerra que les haga reflexionar aquí no lo encontrarán, pero tampoco aquellos que busquen no llevarse ningún mal rato.
Un día perfecto es el estreno más interesante de la semana y la más ambiciosa película del director madrileño. Aranoa ha decidido rodearse de grandes estrellas e ir a por todas… y lo ha conseguido.