Es una lástima que este joven, al que alabo el gesto, se haya adelantado en mi idea. Yo no tengo intención de facilitarles las cosas a un sistema cuyo objetivo es esclavizar a la mayoría de la gente para que vivan de lujo un puñado de descarados. En mi caso la abstención, no es ni activa, ni pasiva, ni roja, ni azul, en realidad comienza a tomar tintes de disidencia.
Eso sí, ahora ya sé que me esposarán como un vulgar delincuente -porque si eres un delincuente de los ricos no te esposan, no tengo constancia de que a delincuentes como Urdangarín y similares les hayan esposado mucho rato-, y que luego me multarán con una cuantía que puede llegar incluso a las 3000 euros. ¿Tanto dinero hacer perder a los partidos políticos que alguien ponga dificultades para constituir su altar de las mentiras?
Espero que para enmendar el desaguisado, la administración, tras multarle, también le ofrezca la posibilidad de ser jurado en algún juicio en el que pueda ser sobornado por algún político ladrón. Más que nada para que el chaval pueda sacar un dinero con el que pagar la multa.
En cualquier caso mi apoyo a Héctor Beas. Espero que en las próximas elecciones no se pueda poner cara a quien se niega a ser presidente de mesa debido al gran número de personas que toman ejemplo de la estupenda desobediencia civil de Héctor.