La respuesta no es fácil, pero está claro que La fuerza del honor (originalmente Courageous) está provocando un fuerte impacto en las audiencias. No tiene efectos especiales, ni actores de renombre, ni un director de campanillas... pero posee un guión poderoso que empuja a desear ser mejor padre.
Cuenta la historia de cuatro oficiales de policía que viven el día a día combatiendo el crimen en las calles y, a la vez, enfrentan una lucha en casa para la cual no están preparados.
El cine con valores vende...
La fuerza del honor (Courageous) es el cuarto filme de la productora Sherwood Pictures, proyecto cinematográfico de la Iglesia Bautista de Sherwood, en Albany, Georgia. El estudio produjo con anterioridad las cintas Prueba de fuego que se convirtió en el filme independiente más taquillero en el 2008, y Facing the Giants.
"Los padres que van a ver la película -señala el crítico cinematográfico Michael Foust- salen del cine diciendo: ¡Es la mejor película que he visto nunca!". Foust considera que los responsables de Sherwood Pictures se han superado en este filme. "No es que sea mejor que Prueba de fuego... es que juega en otra liga. Cuando termina la película, sales del cine y lo único que quieres es gritar a todo el mundo: ´¡Tengo que ser mejor padre!´". Ciertamente parece que el cristianismo está de moda en Hollywood.
Stephen Kendrick, coguionista y coproductor de la película junto con su hermano Alex, señala que esta producción es "una llamada a todos los hombres para que sean líderes espirituales de sus vidas, de sus esposas, de sus hijos... ¿Qué impacto social tendría que cada hombre se decidiese a que en su hogar se sirviese a Dios?".
Un político reconocido ha exclamado tras ver la cinta: "Nuestra sociedad necesita esta película". Y es que la desintegración familiar, y en particular en las comunidades negra y latina, es especialmente virulenta en Estados Unidos. El filme refleja el resultado que produce la ausencia del padre, con jóvenes entregados a la droga, al crimen, o al pasotismo más excluyente.
Alianza con los católicos
Sherwood Pictures, la productora de los hermanos Kendrick muy unida a la acción evangelizadora de la comunidad Baptista de Estados Unidos, es, sin embargo, un ejemplo de cómo sus producciones cinematográficas no pretenden limitarse a su público, sino que quieren acoger a otras iglesias, y muy especialmente a la Católica. Para ello se proponen, desde la redacción del guión, no molestar lo más mínimo, desde un punto doctrinal, a los demás cristianos.
Esa actitud de Sherwood Pictures es muy proactiva con los católicos. De hecho, en La fuerza del honor pidió la colaboración de una agencia católica de relaciones públicas, y en su producción participaron hasta diez instituciones católicas: Knights of Columbus’ Fathers for Good, Alexander House, National Fellowship of Catholic Men, The King’s Men, the National Association of Catholic Family Life Ministers, Fraternus, That Man Is You, Familia y The Men of St. Joseph.
"Teníamos la seguridad, antes incluso de que comenzase la producción, de que los católicos no tendrían nada de qué preocuparse desde un punto de vista sacramental o doctrinal", explica la vicepresidenta ejecutiva de Maximus, Lisa Wheeler: "Son películas hechas por protestantes, así que no se cuentan con una perspectiva católica, pero no hay nada objetable en ellas".
Lo cierto es que Prueba de Fuego fue recomendada por varios obispos, y muy probablemente La fuerza del honor lo será también. No en vano es una apología de la familia y la auténtica paternidad (vía: Religión en Libertad).