Un gigante con pies de barro (1)

Por Tiburciosamsa

Mapa del imperio mogol en su momento de máxima extensión bajo Aurangzeb. A su muerte el imperio se iría por el desaguadero de la Historia a paso de carga.  
Los mogoles consiguieron crear el mayor imperio que la India había conocido hasta entonces. En su momento de mayor extensión, a la muerte de Aurangzeb en 1707 el imperio abarcaba la práctica totalidad del Subcontinente indio, excepción hecha del extremo sur, así como Afghanistán. Y con toda esa extensión de unos cuatro millones y medio de kilómetros cuadrados, el imperio mogol no era más que un gigante con pies de barro. De hecho, la descomposición del imperio comenzó con el cadáver de Aurangzeb todavía caliente y para finales del siglo XVIII sus descendientes apenas eran más que los alcaldes dignificados de Delhi. Los mogoles conquistaron la India con relativa facilidad en 1526. Fueron expulsados en 1540 y en 1555 volvieron para quedarse. La facilidad con la que conquistaron la India y mantuvieron su predominio durante tantos años se explican por dos motivos principales: su superioridad militar y la desunión de los gobernantes indios.Los mogoles eran descendientes de los mongoles de Gengis Khan, que en su paso por Asia Central se habían turquizado primero y luego habían abrazado la cultura persa. Su antepasado más inmediato era el temible Tamerlán (1336-1405), ese señor tan simpático al que le divertía levantar torres con las cabezas cortadas de sus enemigos vencidos, diversión que continuaron sus descendientes.Los mogoles eran un pueblo marcial. Sus dos bazas militares principales cuando conquistaron la India eran su caballería, muy superior a la India, y su potencia de fuego. Cuando invadieron la India, las armas de fuego estaban muy poco extendidas en el subcontinente, de forma que su artillería y sus mosquetes, aunque rústicos para los estándares europeos, les proporcionaban una ventaja sustancial sobre sus enemigos. Pero su baza principal era la caballería. En general, la infantería india era de poca calidad, indisciplinada y perdía rápidamente la cohesión. La élite del ejército era la caballeria, compuesta por veteranos bien armados y bien pagados, que con una carga vigorosa podian decidir una batalla. La otra baza de los mogoles fue la desunión de los indios. La división en castas fue un factor determinante para evitar que surgiera una identidad india que pudiera aglutinar a los hindúes frente a los invasores musulmanes. Un brahman se sentía más próximo a un noble musulmán que a un sudra. En muchos reinos, los gobernantes también eran musulmanes, pero nunca llegaron a formar coaliciones contra los mogoles. Mientras que la segunda de las bazas la mantendrían siempre, la ventaja militar fue desapareciendo gradualmente. Poco a poco los mogoles fueron perdiendo su ardor guerrero. Babur en Panipat en 1526 sólo disponía de unos 20.000 combatientes y derrotó a un ejército Bastante más numeroso. Esto dice mucho de la bravura de los mogoles, de las dotes tácticas de Babur y de la escasa combatividad de la infantería india. A medida que pasasen las décadas, los ejércitos mogoles serían cada vez de mayor tamaño y más ineficientes. Aurangzeb en sus campañas del Deccan llegó a contar con 170.000 jinetes más un número mucho mayor de infantes. Pero estos eran puros números. Los observadores europeos de la época cuentan que la mayor parte no servían más que para hacer bulto. Uno de ellos calculó que 30.000 soldados europeos medianejos podrían conquistar el imperio mogol. La pérdida de moral y de acometividad se vio agravada por dos hechos. Uno fue que los mogoles no llegaron a desarrollar cadenas de mando eficaces que les permitiesen gestionar una masa tan ingente de combatientes. No, la figura del sargento mayor no se les ocurrió. El otro fue que en los casi doscientos años que fueron la potencia hegemónica en el subcontinente prácticamente no innovaron nada en el campo de la tecnología militar. Mientras que en Europa los arcos desaparecían, la caballeria iba perdiendo importancia y artillería y arcabuces y mosquetes ganaban precisión y potencia de fuego, los mogoles a comienzos del siglo XVIII seguían utilizando las mismas armas y tácticas con las que conquistaran en su día la India.