Durante décadas, esta obra maestra de FranciscoGoya estuvo colgada sobre una chimenea en el salón principal del sueglo de Esperanza Aguirrem en el palacete en donde reside la expresidentas y su marido.
ElDiario.es desgrana una investigación de Ignacio Escolar sobre las graves irregularidades por parte de Esperanza Aguirre y su marido en la venta de un cuadro pintado por Goya.El marido de Esperanza Aguirre simuló una donación para defraudar impuestos y apropiarse del Goya, según denuncia su hermano.
Escolar explica que Fernando Ramírez de Haro simuló ante notario una “donación verbal” del cuadro de Goya y otras obras de arte por un valor total de 8 millones de euros, según denuncia su hermano Íñigo Ramírez de Haro, que le acusa ante la Justicia de apropiarse de esa herencia y defraudar al fisco. El supuesto donante verbal era su padre, suegro de Aguirre, que cuando se escrituró la donación llevaba un año y medio muerto
El retrato de uno de los antepasados aristócratas de los Ramírez de Haro colgaba en el mismo palacete donde vive el matrimonio, colgaba. El cuadro era propiedad del suegro de Esperanza Aguirre, que se murió en 2010 sin saber que era un Goya. Cuatro meses después de descubrirlo, en 2012, tras el peritaje y comprobación de que se trataba de un Goya auténtico, Aguirre y su marido vendieron el cuadro a Villar Mir, fundador de la constructora OHL, por 5 millones de euros. El cuñado de Aguirre denuncia ante la Justicia que su hermano se apropió de esa herencia y que simuló una “donación verbal” del cuadro, registrada ante notario cuando el padre ya había muerto. Acusa al matrimonio de estafa, fraude fiscal, blanqueo y apropiación indebida.
En la denuncia, el cuñado de Aguirre sostiene que, pese a que la familia sospechaba desde hace mucho que esa obra pertenecía a Goya, el matrimonio no le dio importancia y Aguirre les pidió (entre lágrimas) poder vender el cuadro para subsanar la delicada situación económica que atravesaban los negocios de su marido. Finalmente, los cuñados de Aguirre aceptaron y les permitieron vender el cuadro para sacar a su hermano del apuro económico y más tarde harían cuentas. Algo que según la querella nunca ha ocurrido y que con la venta solo se han lucrado la ex presidenta madrileña y su marido.