Durante la historia del fútbol, pocos han sido los africanos que han jugado en Sudamérica. Varios son los casos, pero un hecho inusual a partir de 1950. Algunos de éstos casos relatan historias de niños que han viajado solo en barcos provenientes de África con incierto destino, como Bayan Mahmud, que abandonó Ghana y ahora juega en las inferiores de Boca Juniors en un ejemplo de superación personal. La sórdida realidad es que no existe una apuesta desde los clubes sudamericanos por las jóvenes promesas, los jugadores con cierta experiencia o los veteranos provenientes del continente africano. ¿Motivo? Quizá sea el idioma, pues si nos ajustamos a los criterios fisionómicos y estilísticos de los jugadores, su adaptación no sería un factor insalvable. Es cierto que Brasil ha acogido jugadores congoleños, por ejemplo, pero al ser una colonia de Portugal, el factor lingüístico facilita su adaptación.
Pero como muchas de nuestras historias, hoy relatamos un caso excepcional. Una excepción camerunesa de veinte años que está volviendo locos a los brasileños. Su nombre es Joel y su escenario Coritiba. Joel llegó a Brasil en 2009 con 16 años recién cumplidos. Empezó a vivir en una pequeña ciudad del estado de Paraná, Iraty. Allí jugó en el club de la ciudad, Iraty Sport Club. Después de 2 años, en 2011, pasó a un equipo más grande del mismo estado, Lodrina, y ya en 2013 comenzará a jugar a gran nivel en el primer equipo, perteneciente a la Serie D brasileña.
Su explosión en 2014 fue espectacular: ganó con Londrina el Paranaense, derrotando en las semifinales al Atlético PR y marcó dos goles en la Copa Brasil al Santos, logros que le granjearon el interés de unos empresarios alemanes que aceleraron su fichaje por Coritiba tras marcar tres tantos en cinco partidos de la Serie D. Ahora mismo, Joel es el delantero más querido del coxa. Es el máximo artillero del equipo y sus goles son socorro ante el abismo del descenso.
Así lo aseguran en Brasil. El camerunés pertenece a un grupo inversor germano que obligó a Londrina a ceder al jugador a un club de Serie A para ponerlo en el escaparate Mundial. No es el primer caso. Casualmente en Londrina jugaba Wendell, lateral actualmente del Bayer Leverkusen que antes de debutar en Alemania fue cedido a Gremio. Parece que la historia se repetirá y Joel jugará en la Bundesliga a partir de enero. El presidente de Londrina, Sergio Malucelli, ya se ha pronunciado varias veces, confirmando el hecho de que varios equipos de la Serie A brasileña están dispuestos a contratar al jugador. Pero aquí quién manda no es ni el club ni el jugador, sino el grupo inversor que tiene la propiedad futbolística del camerunés. Sin más rodeos.
Para concluir, posiblemente Joel se adaptará fácilmente a Alemania. Ya ha estado en las inferiores de Camerún y su futuro se antoja brillante. Sorprende como caló en Coritiba, un equipo especial en Brasil y cómo con tan solo 20 años, ya desempeña un papel protagonista en el rol ofensivo del plantel. Esperemos poder contaros muchas satisfacciones tras sus primeros pasos fuera de Brasil. Quién sabe si algún día necesitaremos saber de él por nuestra liga… todos atentos al 'león' de Coritiba.