Desde hace mucho los viñadores han intentado diversas maneras de contrarrestar esta amenaza, pasando por redes y coberturas protectoras, medios químicos y hasta ruidos, pero a partir de 2003 la casa Pommery, una de las más prestigiosas de la región, ha puesto en práctica otro método para proteger sus 25 hectáreas de viñas, que interesa cada vez más a los agricultores. Han contratado para ello a… ¡Chico y Benti!
Los busardos son liberados para patrullar los viñedos al amanecer o en el ocaso, pero de manera aleatoria, a fin de no generar hábitos en la población de estorninos y similares. A pesar de estar domesticados, los depredadores conservan su instinto de cazadores y por si fuera poco son sometidos a ayuno antes de ser soltados. Así se garantiza que generen suficiente estrés entre los pajarillos y que estos guarden prudente distancia de las uvas. El método –muy en línea con las tendencias ecológicas actuales– ha sido probado también en otros países como España y los resultados son alentadores, además de que mantiene contentos no sólo a los viticultores, sino también a quienes luchan por la protección del ambiente.
Las imágenes que ilustran este artículo fueron obtenidas en Internet. Ellas corresponden, en orden descendente, a:
1. Busardo de Harris en pleno vuelo.2. Viñedo de la región de Champagne.3. Bandada de estorninos.4. Busardo de Harris vigilante.5. Busardo de Harris al momento de ser liberado por su halconero.
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