No obstante, el número de amparos y quejosos se incrementará en las próximas horas, debido a que siguen sin contabilizarse las demandas presentadas en el interior del país y a que seguían llegando trabajadores inconformes a los juzgadores federales de amparo que se encuentran en las inmediaciones del Metro San Lázaro.A unas horas de que concluyera el plazo para presentar amparos contra la reforma laboral, los juzgados de Distrito con residencia en el Distrito Federal habían recibido mil 991 demandas que representan a un millón 123 mil 887 personas que impugnan la constitucionalidad de las modificaciones publicadas en el Diario Oficial de la Federación el pasado 30 de noviembre del 2012.
No obstante, el número de amparos y quejosos se incrementará en las próximas horas, debido a que siguen sin contabilizarse las demandas presentadas en el interior del país y a que seguían llegando trabajadores inconformes a los juzgados federales de amparo que se encuentran en las inmediaciones del Metro San Lázaro.
Entre las organizaciones gremiales que ayer se sumaron a los amparos contra la reforma laboral se encuentran el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que dirige la maestra Elba Esther Gordillo.
Previamente, el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM) y el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) se convirtieron en las organizaciones gremiales que más juicios de garantías interpusieron en contra de esta reforma.
Cabe señalar que en el Palacio de Justicia Federal desde las tres de la tarde y hasta la medianoche del día de ayer, continuaron llegando cientos de personas a promover demandas individuales alegando la inconstitucionalidad de los cambios a la Ley Federal del Trabajo y la violación a los principios del artículo 123 de la Carta Magna.
Por acuerdo del Consejo de la Judicatura Federal, los casi dos mil amparos presentados contra la reforma laboral serán turnados a los Juzgados Primero y Segundo de Distrito del Centro Auxiliar de la Primera Región, ambos con sede en el Distrito Federal, debido a la carga de trabajo que dichas demandas representan para juzgadores ordinarios.
Ambos impartidores de justicia son los mismos que en su momento tuvieron que revisar y responder los miles juicios de amparo presentados por trabajadores del estado en contra de las reformas a la Ley del ISSSTE que modificaron el régimen de pensiones para los servidores públicos.