Un nuevo estudio científico evidencia que, para quemar grasa, una alta intensidad está por encima de las largas sesiones. El informe que vamos a desgranar a continuación ha sido realizado por la Universidad de McMaster, y publicado por la Librería Pública de la Ciencia, en su prestigiosa revista científica. Los datos inciden en que una sesión corta pero muy intensa sobre la bicicleta es más efectiva que una larga sesión.
Para realizar el estudio se seleccionaron a un total de 27 hombres con poca actividad física. Se les podría catalogar con un perfil sedentario. Se les dividió en dos grupos, y durante doce semanas el grupo 1 realizó entrenamientos muy cortos de alta intensidad, mientras que el grupo 2 se centró en ejercicios más alargados en el tiempo y de menor intensidad.
Alta intensidad sobre la bicicleta
El entrenamiento de alta intensidad consistía en tres intervalos en sprint de veinte segundos, con dos minutos de recuperación entre cada uno de los sprints.
Es decir, cada una de las pruebas no superaba los diez minutos de entrenamiento. A su vez, el grupo dos realizó un entrenamiento en bicicleta cuarenta y cinco minutos de bicicleta continua, con una intensidad que ronda el 70% de la capacidad máxima.
Tanto los primeros como los segundos realizaron un calentamiento de dos minutos antes de comenzar las sesiones, y finalizaron con tres minutos de estiramientos y relajación para cerrar el entrenamiento.
Después de tres meses con esta rutina, los resultados en ambos grupos fueron muy similares. Es decir, mientras que el grupo 1 invirtió unos 10 minutos en conseguir una serie de beneficios para su salud, el grupo 2 invirtió unos 50 minutos en conseguir esos mismos resultados. ¿La diferencia? Simplemente la intensidad. Puedes encontrar rodillos de ciclismo a buen precio en nuestra web.
El autor principal del estudio se ha mostrado satisfecho con los resultados arrojados, porque entiende que facilitará la relación de las personas con el deporte. Martin Gibala ha recordado que la mayoría de la gente no hace deporte por falta de tiempo.
Esta es la principal excusa en un alto porcentaje de personas que podríamos considerar que tienen una vida sedentaria. Sin embargo, con este tipo de estudios, se confirma que no es tiempo lo que una persona necesita para estar en forma.
En las rutinas de entrenamiento, sobre bicicleta o sobre cualquier otra actividad deportiva, se ha considerado durante un largo periodo de tiempo que los largos periodos eran lo más recomendable. Sin embargo, este es el enésimo estudio que demuestra que la explosividad a la hora de realizar actividades deportivas juega un papel fundamental para aumentar el rendimiento.
Para obtener estas conclusiones en el analizado informa, se procedió a medir el consumo máximo de oxigeno, que aumentó en igual medida en ambos grupos, así como la sensibilidad a la insulina.
Efectivamente, aumentó en igual medida tanto en el grupo que invirtió diez minutos en su ejercicio como en que necesitó 45 minutos de entrenamiento en bici.
Cómo realizar el entrenamiento al aire libre
Del estudio se ha hecho eco también la revista Men´s Fitness, quien nos recomienda realizar la serie que ha sido programada para este estudio en una bicicleta estática. Pero los amantes del ciclismo quizás deseen salir a la calle con su bicicleta, y en realidad pueden realizar los mismos intervalos al aire libre sin problema.
La rutina en cualquier caso sería: dos minutos de calentamiento, un sprint de 20 segundos a máxima velocidad, un periodo de recuperación de no más de dos minutos, y vuelta a la máxima velocidad durante veinte segundos. Una recuperación más, un sprint más del mismo periodo de tiempo, y pasaremos a la última recuperación, que dará paso a los tres últimos minutos de bajada de intensidad y relajación.
Gibala asegura que no es estríctamente necesario utilizar una bicicleta para hacer estas sesiones. En realidad, según asegura, lo importante es que tengamos en mente que la alta intensidad puede ser tan efectiva como las largas sesiones, ya sea en running, natación u otras modalidades deportivas.