Sin lugar a dudas esta es la mejor novela que yo he leído de este autor. Estamos en el Perú de finales de los cincuenta, principio de los sesenta, ante una sociedad completamente desequilibrada, como suele ser habitual, los ricos muy ricos y los pobres un montón de “cholos” miserables y serviles que no tienen nada.
La novela nos lleva a través de la visión de Julius por todos los rincones sociales desde el club de golf elitista y las mansiones de la alta sociedad limeña , pasando por los inolvidables colegios de monjas al uso, de lo más rastrero, servil y clasista, hasta los habitantes de las modestas viviendas de clase media baja, que por algo imprevisto comparten colegio con los ricos, pero siendo discriminados por las serviles monjitas.
Una descripción certera y veraz de toda una época, una crítica sutil y nada disonante, que nos muestra una realidad que las sociedades pretenden ocultar por pura vergüenza, nada que no conozcamos en nuestra sociedad en la misma época.