Un niño construyó un Lamborghini tamaño real con una impresora 3d y no creas lo que hizo la empresa, para la gran mayoría de personas es imposible darse el pequeño lujo de pagar 350 mil dólares por un Lamborghini pero piensa si no tienes para pagarlo porque no construir uno.
Un día le propuso a su padre una genial idea construir una réplica de ese auto a escala real cualquier padre hubiera dicho simplemente no o se hubiera reído pero el padre de este niño le dijo que sí inmediatamente pusieron manos a la obra, Luego de más de año y medio y aunque eran ayudados por una impresora 3d estaban muy lejos de terminar.
La historia de este chico llego a la propia marca de coches Lamborghini de los cuales tiene una fuerte regla de no aceptan las falsificaciones es por eso que incluso eso tal vez llevaba a demandar a la familia puede ser una copia de su auto pero en cambio decidieron hacer algo sorprendente y darle una gran sorpresa al pequeño, durante la noche cambiaron su coche réplica o bueno lo que llevaban de un Lamborghini del modelo especial que tanto le gustaba el cual era de color negro y era de verdad.
Cuando por fin el niño ve el carro se vuelve loco obviamente la empresa ha compartido el caso en su canal oficial de YouTube con un vídeo llamado una verdadera historia navideña para los verdaderos amantes de Lamborghini, sin embargo no todo es color de rosa la empresa Lamborghini no le regaló el coche sino que se los prestó por dos semanas para que se pueda sentir la verdadera experiencia de viajar en un Lamborghini aún así la sonrisa del pequeño es increíble sobre todo escuchar el rugido del coche.
Tal como lo dije anteriormente la empresa es muy famosa por su lucha contra las falsificaciones aunque este caso parece un poco diferente ya que lejos de tomar represalias unos días antes de navidad’ decidió dar una sorpresa a la familia y cambio la réplica por un verdadero coche para que así el padre y su hijo pudieran disfrutarlo por algunos días sobre esto la empresa dio un comunicado el cual dice Lamborghini está en contra de cualquier intento de falsificación sin embargo una historia real de una pasión tan auténtica merece ser presentada por eso elegimos contar este proyecto de Sterling Backus y su hijo de 12 años Xander.