El 1° de Mayo es el Día Internacional del Trabajo. No obstante, hoy cabe la pregunta de si el concepto de ‘trabajo’ se debe redefinir a la luz de lo que está ocurriendo desde hace unas semanas en todo el mundo y, sobre todo, de lo que viene. La actual coyuntura de confinamiento replantea las relaciones políticas, económicas, culturales y sociales.
Hoy ya muchos empresarios, sobre todo aquellos que cuentan con nóminas pequeñas de seis, diez o veinte empleados, están empezando a preguntarse si vale la pena seguir pagando arriendos para sus oficinas cuando ya han podido comprobar que los colaboradores pueden, no solo seguir adelante, sino ser más costo eficientes desde sus casas.
Esta situación ha evidenciado la llamada ‘burbuja inmobiliaria’ con sus onerosos cánones que hoy en día las empresas empiezan a reevaluar ¿Suena esto como un ataque al sector inmobiliario? No lo es, se trata más bien de cómo repiensan su negocio en función de otro tipo de espacios que sea más útil a las empresas.
El aislamiento está haciendo que los mismos espacios físicos sean redefinidos para ser más productivos. Muchos restaurantes, por ejemplo, están adaptando su espacio de atención en líneas de producción y ya no es indispensable estar en lugares lujosos porque lo que importa es atender los domicilios. Y para eso se puede estar prácticamente en cualquier lugar. Ese mismo restaurante está reentrenando a su talento humano para atender canales de comunicación como las redes sociales o para empacar los productos en las mejores condiciones de asepsia.
La transformación de los negocios afecta a todos los sectores económicos y en cada uno de ellos, a los distintos roles dentro de una empresa ¿Cuál será el nuevo sentido de la supervisión? El liderazgo hoy tiene que ser un atributo compartido por todos los miembros, en lugar de una colección de cacicazgos marchitos. La autogestión adquiere una importancia capital en este nuevo rumbo de las empresas.
El confinamiento nos reta y tenemos que responder con creatividad e innovación. El Día del Trabajo ni los otros 364 van a ser lo mismo luego de este momento de la historia.
Nota: Esta columna fue publicada originalmente en Vanguardia el día 30 de abril de 2020.