Científicos de la Universidad de York han identificado un objetivo terapéutico que podría conducir al desarrollo de nuevos tratamientos específicos para el cáncer de la sangre.
El estudio, realizado por investigadores del Centro de Inmunología e infección en York, trabajando junto a científicos del Departamento de Medicina de la Universidad de Stony Brook en los EE.UU., podría conducir a mejores tratamientos para un grupo de cánceres hematológicos llamado neoplasias mieloproliferativas (MPN).
Estos se caracterizan por el aumento de uno o más tipos de células de la sangre, por lo general los glóbulos rojos, que transportan oxígeno por todo el cuerpo o plaquetas, que coagulan la sangre e impiden el sangrado y el surgimiento de moretones fácilmente.
El control estricto del número de células sanguíneas en circulación en el cuerpo es importante para una buena salud, pero, en la mayoría de los pacientes MPN, una mutación en una proteína llamada JAK2 hace que las células de la sangre proliferen demasiado rápido.
El equipo de la CII -un centro de investigación establecido conjuntamente por la Universidad de York el Departamento de Biología de la Facultad de Medicina Hull York- descubrió que la molécula de la proteína Mpl, que recibe señales químicas desde fuera de la célula, es un requisito previo para el desarrollo del mutante de la enfermedad JAK2.
Mediante el uso de modelos de laboratorio el equipo halló que “apagar” el gen en el receptor Mpl reduce su expresión con el resultado de que la enfermedad no se desarrolla. La investigación se publica en la revista Blood .
El Dr. Ian Hitchcock, de la CII, dice: “Esto es importante médicamente porque significa que podemos apuntar directamente a Mpl. Si podemos interrumpir su actividad, tenemos un tratamiento completamente nuevo para la enfermedad. Descubrimos que no es necesario deshacerse del receptor por completo, sólo se tiene que reducir su expresión para tener un efecto significativo en el desarrollo de la MPN “.
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