Un papel, mi reino por un papel

Publicado el 06 diciembre 2014 por Vicente Jiménez @Parnasillo

Al principio de la obra un feo y jorobado Ricardo pronuncia un impresionante monólogo y la famosa frase: "Ya el invierno de nuestra desventura se ha transformado en un glorioso estío por este sol de York" anticipando lo que habrá de venir (...) deforme inacabado, enviado antes de tiempo a este mundo; escasamente hecho a medias, y además de eso, tan tullido y desfigurado que hasta los perros me ladran cuando me paro ante ellos (...) Por lo tanto, puesto que no puedo mostrarme como un amante para entretenerme en estos días tan bien descritos, estoy decidido a mostrarme como un canalla y a odiar los ociosos placeres de estos días. He tendido conspiraciones, insinuaciones peligrosas, con ebrias profecías, libelos y sueños, para hacer que... Acto I Escena I

Así de deforme en cuerpo y alma retrató Shakespeare al malvado Ricardo en este monólogo desde la primera frase del primer acto, y que a modo de confesión predice para el espectador dantescas consecuencias sobre los actos y perversas intenciones de Ricardo. Nos prepara para ser testigos de traiciones, asesinatos y un aparente triunfo del mal con la coronación del tirano y donde se suman más crímenes y horrores, pero con una reconfortante justicia poética cuando al final la maldad se halla sola en su última lucha contra el bien. Ricardo III, desesperado y aislado de su ejército medieval, sin nadie que le asista en el fragor de la batalla es derribado del caballo, pierde la corona e implora mientras se bate a pie " un caballo, mi reino por un caballo" antes de morir.

La literatura se graba a fuego en nuestros corazones y luego vemos sus reflejos en la vida real: cuando ayer asistimos atónitos al esperpéntico espectáculo televisivo del número uno del novel y mediaticamente mimadísimo partido "Podemos" negando histriónicamente la " presunta travesura" de su número dos, mostrando y gimoteando con un papelito en mano: " un papel, no había entregado un papel" ... se le olvidó un papel... me recordó a un Ricardo III clamando " un caballo, mi reino por un caballo " a modo de un papel, mi reino por un papel; porque son estos detalles, amigo, los que muchos captan aunque no hayan leído a Shakespeare y hacen caer o levantan resultado electorales.

Y cuando prosiguió con su discurso de semejante altura intelectual con más improperios contra "la casta" y su eterno mitin de utopías sobre " hay que " para continuar con su mensaje victimista de una casta que nos está injuriando porque no quieren perder sus privilegios, es todo una campaña, etc; sonaba todo ya un poco a redundante y de bajísimo nivel ¿Es que nos toman por tontos? Prefiero no contestar.

Ante tanta calidad intelectual del primero en mando y moral del segundo en dirección uno se pregunta en manos de quiénes están nuestras universidades y nuestros potenciales futuros. Al igual que en el monólogo de Ricardo III no se presagia nada bueno.

En primer lugar obviar la importancia de un papel como discurso y justificación suena a chiste... no suena a seriedad profesional si el "olvido" encima se utiliza como elemento de victimización. Ni un analfabeto (que además no tiene culpa de serlo) despreciaría jamás (que tampoco) el valor de un papel. Cualquier presentador un poco sagaz hubiese desarmado el discurso victimista de Pablo Iglesias mediante una sola pregunta: ¿Se olvidó también Errejón del papel de banco para cobrar religiosamente cada mes?

Que le pregunten a Bárcenas la importancia de un papel o de un cuaderno de anotaciones, por ejemplo, a un emigrante "sin papeles". Pero en el fondo el number one de la formación no hacía otra cosa que ser una triste correa de transmisión de su segundo en mando. "Joder, no sabéis aguantar una broma: se me olvidó decir que no iría a trabajar (...) que yo trabajo en casa ". Y se queda tan campante...

Aún y de ser verdad lo que dice Errejón ¿en manos de quienes estamos? Unos que pagan a unos sujetos que no se presentan al trabajo, puesto que no tenían constancia de que faltaría, y ni envían una nota reclamando ese papel. En manos de quienes estamos que cuando otros se aprovechan de un sistema que les paga antes de entregar el trabajo sin saber si ese trabajo tendrá o no la calidad suficiente. Uno se plantea si solo a personas con contactos, es decir, casta, pueden darle semejante trato en un sistema corrupto que nadie piensa cambiar, por mucho que pregonen. Además, ya he explicado en otros trabajos cómo el problema es el sistema, antes que las personas y eso no lo toca Podemos ni no Podemos.., como tampoco se lo plantea ningún partido. Todos confluyen en su apego a la partidocracia o por desconocimiento de la democracia formal o por egoísmo.

Nada.., que para un observador perplejo como yo en este país de picaresca el dinero de los impuestos tiene pinta de caer en manos del primero que pasa o bien porque tenga contactos y se entera de los chanchullos, o bien por lo que sea, y ya está. Eso no me lo quita a mí nadie de la cabeza hasta que alcancemos la democracia formal.

Ya me diréis a quién representa una lista si no es al jefe del partido, sea esta lista abierta, cerrada o a topos. Pero sumemos, sumemos... Pues bien, s i los cabeza de lista de un partido le dan tan poca importancia a un papel, imaginad si les dará igual o no el contenido de un programa electoral que también supongo deberían ofrecerse a los ciudadanos en papeles : programa que a un liberal como yo, que antepone la libertad a la igualdad, le pondrá los pelos de punta mucho más que los otros partidos, pues encima éstos se declaran de extrema izquierda.

¿Puedo deducir que como para ellos los papeles no son importantes, puesto que se los olvidan y no hay consecuencias, (reitero, el papel del banco no se le olvidó), aquí, en caso de mandar ellos, planean obligar a realizar todas las gestiones vía Internet con programas hechos por sus propios " expertos "?

Así nos veríamos obligados por la administración a hacerlo todo vía Internet y a los que quisiesen algo por escrito en papeles pues " que les den..," o si hay quienes prefiriesen las cosas en un papel por su aversión a la informática o porque desconfían de la e-democracia (votaciones por Internet) pues nada: a aplicarse en el teclado del ordenador. Y quienes desconfían de las votaciones por internet no andarían errados, porque no existe ninguna garantía de control sobre lo que pasa entre el voto, se opera en el ordenador mediante un programa (manipulado o no) y el resultado se traduce a dato electoral sin interventores ni control alguno. Y ahí me refiero a al recuento de votos, etc.., en fin amigos. Que escuchándole se le ponen a uno los pelos como escarpias porque como nunca especifica ni concreta nada no sabes que doble lectura puede tener nada de lo que diga. Luego es capaz de sacar aquello de "yo ya lo dije"- No podéis decir que no lo sabíais cuando me votasteis...

En fin, todo se traduce a un papel, mi reino por un papel... Ya que no se puede obtener mucho estímulo intelectual de escuchar a Pablo Iglesias y lo que oigo me asusta por lo que no concreta, a partir de ahora me dedicaré a leer Ricardo III o a ver Sálvame, que me será más gratificante. No volveré a perder más el tiempo. Yo ya sé a quién no votaré.

El tema de Podemos el poder y la ambición, por ese orden.