Un peludito volviéndose "yankee"

Por Kim_cukyscookies
El otro día, estaba haciendo una tarta para una amiga cuando me fijé en que Cuky no estaba en su camita durmiendo la siesta. Si no estaba dándome instrucciones tampoco, ¿dónde podía estar?. No pasó mucho tiempo hasta que lo vi aparecer por la puerta de la cocina por el rabillo del ojo, y antes de que pudiese levantar la vista para verlo, me gritó contento:-¡¡Soy yankee!!.....
....

Como estoy un poco sorda, no me preguntéis qué fue lo primero que le entendí, porque no era bueno. Eso fue lo que me hizo levantar la vista. Llevaba unos pantaloncillos graciosísimos de color blanco, una camisa del mismo color y rayas verticales finitas en azul marino, una gorra también azul marino, (con un par de letra entrelazadas, la N y la Y y que, al quedarle algo grande, le caía hacia un lado tapándole un poco un ojo), y el conjunto lo completaban una bola y un palo de baseball, pero lo mejor, eran los calcetines azul marino que llevaba por encima de los pantalones. Unos pantalones que había cortado para dejar salir su pequeño rabito, (al que yo llamo "pomón").Como ya estaba acabando de hacer la tarta y necesitaba que se enfriase, le ofrecí un chocolate para merendar y que así pudiese explicarme el por qué de aquel nuevo atuendo. Pero, para mi sorpresa, me rechazó el chocolate post-poniéndolo hasta que hiciésemos algo yankee. ¿Algo yankee?. Pues igual le apetecían unas hamburguesas, pensé. Pero no. Lo que le apetecía era algo dulce. Algo yankee y dulce para mojar en el chocolate. ¡¡Unas galletas de mantequilla de cacahuete!!.Su siguiente paso fue ir a la habitación y coger uno de los libros que nos habían regalado en Navidades. Apareció así en la cocina con el libro de "El Rincón de Bea". Y es que, ¿quién mejor que Bea sabe adaptar una receta americana?. Ya tenía la página señalada y, mientras yo le echaba un vistazo, se puso a preparar los ingredientes, con tan mala fortuna, que cuando estaba batiendo, se le cayó la gorra en el bol... (Algo que yo ya estaba viendo venir...). Así que, vuelta a empezar, pero sin gorra, nos pusimos manos a la obra para preparar unas ricas galletas en un periquete. Pero, ¿y la mantequilla de cacahete?. De eso no había en casa. Se fue de nuevo, esta vez a la despensa, y trajó un par de botes de mantequilla de cacahuete.

-Pero, según las cantidades de la receta, sólo nos hace falta uno. ¿Y el otro?.-El otro es para ir abriendo boca.
Y vaya que si la abrió. Se zampó un bote entero en lo que tardamos en hacer y hornear las galletas, que no llegó a 20 minutos. Y aún así, ¿podéis creeros que luego se tomó el chocolate con las galletas tan pichi?. Pues sí. Y luego cenó. ¡¡Y sobrevivió!!

Galletas de mantequilla de cacahuetePeanut butter cookies:

Receta del libro "El Rincón de Bea"
Ingredientes (para unas 32 galletas de tamaño pequeño-mediano):
 125 grs. de mantequilla315 grs. de mantequilla de cacahuete (nosotros usamos un bote entero del de Mercadona).
105 grs. de azúcar moreno
125 grs. de azúcar blanco
1 huevo L
1 cucharadita de extracto de vainilla
220 grs. de harina
1/2 de levadura química (royal)
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
1/2 cucharadita de sal



Preparación:

 Derretimos la mantequilla normal y la dejamos templar para añadirla a la mantequilla de cacahuete.
 Añadimos a las mantequillas los dos azúcares, el huevo y el extracto de vainilla y batimos bien los ingredientes hasta que quede una mezcla homogénea.
Por otro lado, tamizamos la harina junto con la levadura, el bicarbonato y la sal y añadimos a la mezcla anterior poco a poco, batiendo sin parar. Si lo hacéis con batidora, que sea a velocidad baja. Nosotros en esta parte, empezamos ya a amasar con las manos.
 Cuando la mezcla sea ya uniforme y a penas se pegue en las manos, haremos bolitas algo más pequeñas que una pelotita de golf y las aplastaremos ligeramente con un tenedor, haciendo el típico dibujo de las galletitas de mantequilla de cacahuete americanas. Quedarán ligeramente agrietadas, lo que les da un toque rustiquillo molón.
Si preferís marcarlas con un sello, Bea recomienda que, después de marcarlas, las congelemos una hora al menos antes de hornear. Como no es nuestro caso, pasamos directamente a hornearlas, con horno precalentado a 180º.

 Colocamos papel vegetal o de horno sobre una bandeja donde colocaremos nuestras galletitas y horneamos unos 10-13 minutos(teniendo en cuenta nuestro tamaño). Si las hacéis más grandes, deberéis dejarlas un poco más de tiempo horneando. En todo caso, el tiempo variará entre unos 10 y unos 18 minutos. Fijándonos en que empiezan a dorarse. 
Cuando las saquéis, dejarlas al menos 10 minutos en la misma bandeja para que se enfríen un poco y puedan manipularse, ya que, al sacarlas, estarán aún blanditas, pero no os preocupéis, se irán endureciendo conforme se enfríen. No cometáis el error, (como nosotros con nuestras primeras galletas), al verlas blanditas, volver a meterlas...Porque no os saldrán galletas, os saldrán piedras.

 Por último, pasadlas a una rejilla para que acaben de enfriarse por completo. Y ¡¡listas!! =)

Valoración del chef: Yo diría que en vez de 32 galletas de tamaño pequeño-mediano, salen unas 32 galletas del diámetro de una pelota....No de baseball, no. De golf. Unas galletas ricas, ricas, como las hamburguesas americanas, pero en dulce. Con un toque salado especial que le dan los "manises"... Empiezas con una, y acabas con todas. ¡Se comen como pipas!.Valoración final:2 guaus.
Y os seguiréis preguntando qué me contó Cuky en la "mirienda". Pues resulta que estaba viendo un documental en Historia de los americanos cuando se quedó dormido. En el sueño, era un jugador de baseball americano muy famoso, de los años 50. Le llovían las ofertas publicitarias y era un sex symbol. Pero en esto, se despertó e, intentando quedarse dormido de nuevo para volver a recrearse en aquel maravilloso sueño, no pudo pegar ojo, así que, decidió traerse un poco de la ficción a la realidad y vestirse de jugador de baseball. Pero el pack no estaba completo si no se comía algo americano. Como le pierden las galletas, creo que ya lo tuvo claro desde el primer momento.

Bueno, y con esto, nos despedimos hasta dentro de unos días, ya que nos vamos a unas "mini-vacaciones" ahora que ya recibimos el buen tiempo. Unas mini-vacaciones que, yo por mi parte, me tomaré como meditación y Cuky....Cuky hará lo de siempre: dormir, comer, correr y volver a dormir, comer y correr...¡Qué feliz!.De todas formas, la semana que viene nos tendréis por aquí otra vez. No os dará tiempo a echarnos de menos ;)
¡Un abrazo osuno para todos!
Honey Kiss.
Peace, Love & Music.