En estos días se repiten los comentarios y visiones sobre la guerra de Libia. Por un lado los que indican que solo la intervención bélica salvará a la población del hostigamiento y sojuzgamiento sangriento del sátrapa Gadafi y su prole dictatorial. Por otro lado los que expresan que es una guerra que busca los recursos energéticos de Libia, gas y petróleo, para apoderarse de ellos. Ambas razones, a mi modo de ver son ciertas y solo la innegable y perversa forma de actuar de los países occidentales han hecho que convivan, permitiendo al inicio que el ataque de las tropas fieles a Gadafi causaran los muertos que han ocasionado, y por otro lado, creando una campaña mediática que ha hecho que, por ensalmo, al "aliado" Gadafi, se conviertiera en un monstruo sediento de sangre para al final arrumbar a la percepción, de que la solución solo se alcanzaría mediante el uso de la fuerza amparado por la resolución 1973 de Naciones Unidas.El tiempo manejado de manera perversa ha hecho que la única forma de salida sea la intervención militar. A esta se han unido los países europeos de manera inmediata, con algún problema en cuanto al liderazgo pero que ha sido resuelto a favor del, valga el juego de palabras, "resuelto" Sarkozy. Y se ha vendido como una intervención casi humanitaria y amparada por Naciones Unidas, y la Liga Árabe a diferencia de la guerra de Irak, otra guerra "humanitaria y democrática" y con un amparo algo menor de N.U. que fue denostada como egoísta y terrible.¿Cual es el resultado de todo esto?,Guerra, guerra y guerra y, sobre todo, un jalón más en el camino de que los occidentales, los cruzados, atacan y roban los recursos a los países árabes y musulmanes como en aquellas cruzadas de la edad media. Si esta operación Amanecer de Odisea tendrá o no repercusión en forma de terrorismo integrista o venganza, a la Lockerbie, de Gadafi no lo sabemos pero es una espada de Damocles que existe y que se ha alimentado.Ahora se venderá en los medios como se quiera, y tendremos la sensación, yo la tengo, de que era absolutamente necesario intervenir para evitar la sangría, pero, también que si no se hubiera alimentado al dictador, no se le hubieran dado promesas de no intervención o, simplemente, la zona de exclusión aérea se hubiera puesto en marcha unas semanas antes todo este descalabro no hubiera ocurrido. Claro que, en ese caso, no habría habido razón para la intervención y el expolio.En otras intervenciones similares, las citadas Irak y Afganistán, el resultado de la ocupación final ha quedado en un avispero encendido donde la guerra se ha trasladado a cada casa, cada esquina y donde los aliados no saben como salir sin salir derrotados como en un Vietnam musulmán. Ahora vemos como la situación de represión sangrienta se repite en la siempre díscola Siria. ¿Actuará con celeridad la comunidad internacional para imponer la democracia y el respeto a los seres humanos o, quizás, el hecho de no tener petróleo influirá en la decisión?Por eso porque creo que todo ha sido una operación medida con metrónomo para hacer imprescindible la intervención me muestro partidario del #noalaguerra, como en su día me mostré contra la de Irak o la de Afganistán, participar en una orgía de sangre y egoísmo no es la solución, aunque ahora no haya otra, sino haber previsto que esta circunstancia podría darse.Libia, los intereses, Europa y EEUU. Recuerdos del día de mañana.Libia en este blog: http://almadormida.blogspot.com/search/label/LibiaIrak en este blog: http://almadormida.blogspot.com/search/label/IrakAfganistán en este blog: http://almadormida.blogspot.com/search/label/Afganist%C3%A1nSiria en este blog: http://almadormida.blogspot.com/search/label/SiriaDespierte el alma dormida, avive el seso e despierte.
A fin de cuenta sino pensamos y vivimos para que queremos estar.
Los pensamientos de hoy son recuerdos del mañana que tenemos hoy.