Un par de chicas guapas deciden poner a prueba el poder de atracción que tiene un bonito culo entre la gente. Para ello instalan una minicámara en el pantalón, justo a la altura del culo, luego salen a la calle y pasean durante un rato, luciendo palmito.
Al llegar a casa recuperan la grabación y ésto es lo que se encuentran:
Qué? Pensabas que sólo los babosos se quedan mirando el culo de una tía buena? Menuda sorpresa te has llevado al ver que hay tantos tíos como tías mirándole el culo a la gente por la calle.
Oye, me encanta cuando se aparece Jesucristo en persona, a plena luz del día… Y también le mira el culo!