El evento catastrófico provocó una pequeña edad de hielo que duró mil años y que pudo influir en la aparición de la agricultura. Los científicos creen que la piedra, situada en el yacimiento de Göbekli Tepe, en Turquía, es un monumento que recuerda los hechos.
Científicos de la Universidad de Edimburgo (Escocia) creen haber descifrado unos misteriosos símbolos esculpidos en unos pilares de piedra del yacimiento arqueológico de Göbekli Tepe, en Turquía. Y sus conclusiones son asombrosas. Según los investigadores, los relieves son la prueba de un evento catastrófico que pudo cambiar el curso de la Historia de la humanidad. La teoría es la siguiente: Hace 11.000 años, un enjambre de fragmentos de cometa impactó contra la Tierra, lo que provocó una mini edad de hielo conocida como Dryas Reciente, que duró más de mil años. Muchas especies de grandes animales, entre ellas el mamut lanudo, desaparecieron, y es posible que también causara importantes pérdidas humanas e incluso influyera en la aparición de la agricultura. La investigación aparece publicada en Mediterranean Archaeology and Archaeometry.
Los investigadores creen que estos símbolos, especialmente los de un pilar conocido como la piedra del buitre, que muestra animales tallados, están relacionados con las constelaciones. A su juicio, los animales tallados son símbolos astronómicos. Utilizando un software para emparejar sus posiciones de acuerdo a los patrones de las estrellas, los científicos fecharon el acontecimiento catastrófico en el año 10.950 antes de Cristo, el momento exacto en el que comienza el Dryas Reciente, según los datos de núcleos de hielo de Groenlandia.
El hallazgo respalda la teoría, muy controvertida, de que un impacto cósmico pudo ser la causa de la caída repentina de la temperatura. El gas tóxico envenenó el aire y nubló el cielo, lo que hizo que los grados cayeran en picado. Esto, además de influir en la fauna y la flora de la época, pudo provocar que diferentes grupos humanos se unieran para cultivar cosechas, lo que llevó al desarrollo de la agricultura.
Un observatorio de meteoritos
Según los investigadores, las tallas parecen haber sido importantes para la gente de Göbekli Tepe durante milenios, lo que sugiere que el evento y el clima frío que siguió al impacto probablemente afectaron de forma muy grave a sus vidas.Los investigadores creen que las imágenes fueron concebidas para documentar el evento cataclísmico, y que una talla adicional que muestra a un hombre sin cabeza podía indicar un desastre humano y una extensa pérdida de vidas.
Además, el simbolismo en los pilares demuestra que los cambios a largo plazo en el eje de rotación de la Tierra ya fueron registrados en este momento usando una forma temprana de escritura, y que Göbekli Tepe, considerado el lugar de culto religioso más antiguo del mundo, era un observatorio de meteoritos y cometas.
El hallazgo también apoya una teoría de que nuestro planeta experimenta periodos en los que los impactos de cometas son más probables, debido a que la órbita terrestre intercepta anillos orbitantes de fragmentos de cometas en el espacio.
«Parece que Göbekli Tepe fue, entre otras cosas, un observatorio para vigilar el cielo nocturno. Uno de sus pilares parece haber servido como un monumento a este evento devastador, probablemente el peor día en la historia desde el final de la edad de hielo», señala Martin Sweatman, de la Escuela de Ingeniería de la universidad.
Vía | ABC