Hoy tocamos un deporte que está en pleno auge, y aunque todavía no es conocido por todos, cada vez va cogiendo más adeptos. Se trata del SLACKLINE. Para los menos puestos en la materia, se trata de un deporte de equilibrio, similar a la cuerda floja, pero se utiliza una cinta tensa, fijada a dos puntos, que por lo general suelen ser árboles.
Cada vez es más frecuente encontrar en parques, playas y jardines a grupos de chavales practicando el slackline. Lo más normal suele ser ver caídas bastante graciosas, pero cuando te encuentras con gente que pilota de verdad… hacen maravillas en la cinta; no sólo mantenerse en equilibrio y andar, sino que también son capaces de hacer saltos y volteretas sin caerse . Ver para creer.
Tanto es el éxito de esta modalidad, que ha pasado de realizarse sólo a nivel diversión entre colegas a la competición a nivel nacional y europeo. Aquí podéis ver un fragmento del mundial de Munich:
¿Impresiona el video, eh? Pues este deporte no se queda ahí, hay más modalidades, dentro del slack la más conocida es el trickline, como la del video, la cinta a poca distancia del suelo. Hay otras como el highline o longline, en los cuales la cinta está a 20 o 30 metros del suelo y requiere más seguridad en su colocación y cómo no, más experiencia para practicarlo.
Si os han entrado ganas de practicar esta especie de cuerda floja de andar por casa, está al alcance de todos: por ejemplo, en Decathlon podemos encontrar un kit de iniciación con una cuerda de 15 metros, tensor y bolsa para transportarlos por unos 50 euros, y empezar a nivel principiante a hacer equilibrios.