Según Digital Journal, se trata de la llamada Internet Blacklist Bill (o Protect IP), que impondría una lista negra de direcciones que serían totalmente bloqueadas de servidores y mecanismos de búsqueda y que tiene como principal objetivo sitios con contenido publicado por usuarios, como YouTube y diversas redes sociales, como Facebook y Twitter.
Según este proyecto, los propios sitios y no los usuarios serán responsabilizados por todo el contenido publicado en la dirección, desde videos hasta comentarios. Es decir, si una persona inserta un trabajo, canción o video con derechos de autor que no le pertenecen o no le fueron entregados, estos no serían solo borrados, sino que todo el sitio quedaría fuera del aire.
El proyecto ha sido calificado como una censura y por ello los congresistas y los representantes de las empresas afectadas se reunirán con especialistas para discutir la viabilidad de la medida.
Fuente Digital Journal