He escrito aquí con anterioridad que as veces soy muy cabezota y me pongo medio tonta cuando de best sellers se trata ( la culpa no la tengo yo, la tiene la sociedad, os lo juro) pero cuando el libro lo ha escrito un tipo con talento y elegancia a una se le caen las bragas inmediatamente. Me he leído El Prisionero del Cielo, de Zafón, y la verdad es que me ha quedado un buen regustillo. Me lo ha regalado la madre de mi novio y a ella le debo las gracias, pero multiplicadas por dos.
Con la sombra del viento Zafón se dió a conocer, demostró su talento y cautivó a millones de personas. Pero no todo es oro lo que reluce, por eso hay reconocerle el mérito. Muchos le critican por seguir viviendo del recuerdo de la Sombra del Viento. Muchos dicen que no es un tipo con talento, sino con suerte, y muchos dicen también que cualquiera publíca teniendo una editorial tan fuerte detrás. Muchos también dicen otras muchas barbaridades pero ya se sabe que la envidia es mala malísima. Zafón tiene mérito y os diré por qué : CREE EN SI MISMO. Dicen por internet que con el dinero de un premio literario se fue a vivir a Los Angeles, para cumplir su sueño, dejando su trabajo de toda la vida en una revistilla de Barcelona. Allí empezó a escribir guiones y novelas destinadas al público juvenil, como príncipe en la niebla o luces de septiembre ( que me leí yo ya hace 4.000 años) y desde allí escribió la sombra del viento ya para el público adulto. Una historia que se desenvuelve en la guerra civil española, que tiene unos personajes y un tono cuidadísimos y que entrecruza, como muchos pocos han podido hacerlo, el eterno tema del bien y el mal. Bien es cierto que detrás de la sombra del viento estaba la Editorial Planeta, pero también lo es que los de planeta la descubren en el concurso de Fernando de Lara, donde Zafón quedó finalista y no ganó con una historia que ahora está entre las 100 mejores historias de los últimos 25 años, una lista en la que han participado los escritores más importantes de la lengua española. Entre el jurado del concuso de Lara había un tipiño de la Ed Planeta que sin pensárselo dos veces le ofreció la posibilidad de publicarle un libro. Y eso, mis queridos amigos, pasa NUNCA en la vida de un escritor desconocido.