Un saco para todos

Por Aceituno

Me atrevo a decir que a los seguidores del fotonauta no les gusta el fútbol, aunque puede haber alguna excepción. Son pocos pero fieles. Son cultos, inteligentes, despiertos y con la sensibilidad a flor de piel. Desde luego no son el perfil de gente que llena los estadios cada día de partido. Son exigentes y navegan con responsabilidad. Se conceden a sí mismos pocas licencias para hacer el tonto y probablemente sepan apreciar un buen vino, una buena biblioteca y una buena charla.

Resulta un atrevimiento por mi parte querer definir a la gente que sigue este blog porque habrá de todo, como en botica, y seguramente meteré la pata tratando de fabricar un único saco donde meterlos a todos, pero el otro día, mi chica, me hizo notar que hay que estar hecho de una pasta muy especial para tragarse todos los días estos post densos y trascendentes, con casi ningún espacio para la frivolidad y leerlos, comprenderlos, disfrutarlos, comentarlos…

Tiene razón mi chica, como casi siempre, porque en el mundo de hoy es un milagro que haya gente que emplee parte de su tiempo en tragarse el tostón que meto cada día. Aunque solo sean 5 minutos, pero son 5 minutos en los que hay que leer, sin dibujitos, ni vídeos, ni memes ni nada de eso: hay que leer. No me negarán ustedes que es extraño que me concedan ese tiempo y esa atención ¿no? Por eso me he atrevido a escribir ese primer párrafo de hoy. Si alguien se siente completamente fuera de él, por favor que me lo diga y así nos vamos conociendo todos un poco mejor.

Y por hoy nada más. Así de cortito fue. Menos de 5 minutos no vaya a ser que me pase y termine aburriendo. Mañana más, nuevas fotos y nuevas reflexiones con la inabarcable pretensión de hacer nuestra alma más sabia cada día. Quién sabe, tal vez algún día haya seguidores suficientes como para llenar un estadio de fútbol.

Mientras tanto, casi 600 me parece algo alucinante.