Hacía siglos que no recibía una carta personal. A lo sumo una postal. Y hoy me he encontrado esta carta que me ha hecho sonreír y llorar a partes iguales.
Porque se nota que lo que escribe sale directamente del corazón y ahí ha hecho diana y se ha quedado. Ni que decir tiene que la chapita me ha encantado y también a mis peques que me han obligado a ponérmela casi al instante.
¡¡¡Muchísimas gracias!!!