- Lo profesional y lo personal: sin entrar en valoraciones acerca de sus méritos artísticos, me da la impresión, visionando en su reciente pase televisivo por TVE-2 Soldados de Salamina, que a su director, David Trueba, se le ha ido la mano (y muy largamente), en el recreo y solaz basado en primeros y primerísimos planos de su bien amada Ariadna Gil. No me parece ni bien ni mal –además, he de confesarlo, siento por Ariadna Gil una franca admiración, me parece enormemente atractiva-, y no tengo juicio de valor alguno acerca de tal circunstancia, pero me planteo la pregunta de si se hubiera reproducido en términos similares en el supuesto de que el personaje de Lola Cercas hubiera estado interpretado por cualquiera otra actriz. Creo, sinceramente, que no...
- No es ingenua la mirada: a alguien que no haya visto Solas (1999), los cantos a la dignidad, la incorruptibilidad y la integridad personales que se desprenden de las actitudes de uno de los protagonistas de Habana Blues (2005) –concretamente, el personaje de Ruy, al que da vida el actor cubano Alberto Yoel- pueden resultarle, en el contexto de una situación social como la cubana, un rasgo de ingenuidad excesiva, o el producto de una mirada intencionadamente naïf, fruto mayormente de la simpatía que por la isla caribeña profesa abiertamente el director y guionista del film, Benito Zambrano. Pero resulta indudable que un autor novel que ha sido capaz de trasladar al celuloide una mirada sobre el mundo tan amarga, descorazonadora y tremenda como la que, magistralmente, refleja Solas, puede ser calificado con muchos epítetos, pero no con el de ingenuo. En Habana Blues hay, simplemente, una mirada a través de otros cristales (que también son auténticos y reales, no una mera invención del autor: gracias por regalarnos una Habana sin mugre ni desconchones en las paredes, también existe, como el sur...).
* APUNTE DEL DÍA: ayer ví Biutiful, la última peli de Bardem (sí, ya sé que la ha dirigido González Iñárritu, pero me parece un acto de tremenda injusticia, a la vista del trabajo de Bardem, no calificarla así, como "peli de Bardem"...). Y salí del cine con una sensación tremendamente ambigua: anímicamente hecho polvo, pero con el convencimiento de haber visto una peli excelente, y uno de los trabajos actorales más grandiosos de los últimos años. Altamente recomendable. * Antecedentes penales (El viejo glob de Manuel) V.-* Grageas de cine I.-