Un verano de juegos II

Por Papacangrejo @Papicangrejo
La semana pasada os contaba lo bien que nos lo pasamos jugando con la caja de almacenaje y la carretilla. Así que hoy toca otro juego  con el que pasamos un buen rato todos.
Para ser sincero, esto tenía ganas de hacerlo desde que cangrejito era pequeño, pero no se habían dado las circunstancias apropiadas, es decir, no había conseguido una o varias cajas grandes.

Pero este año, al comprar la piscina hemos tenido suerte, ya que venía en dos cajas muy grandes que hemos podido acoplar y hacer unas ventanas. La decoración interior fue cosa de cangrejito, pinto una cocina y una alfombra. De la decoración exterior se encargó cangrejín. La pena es que sólo tengamos esta foto.

Las ganas que yo tenía vienen porque recuerdo que con unos cuatro o cinco años, llegó a casa una caja enorme, creo que de una nevera, y mi hermana hizo de ella un castillo con su puerta, ventanas, etc. Recuerdo pasar ratos muy buenos en aquella caja hasta que nuestra gata Luna se adueñó de ella. Desde ese día, no nos dejó volver a entrar hasta que la tiramos, la caja claro. Se metía dentro y nos bufaba si intentábamos sacarla o entrar.

Así que, al final, he podido jugar con mis hijos y construir un fuerte de cartón. Linda también jugaba, entraba y salía por las ventanas y por las puertas huyendo de cangrejín que la perseguía desencajado de risa.

Yo también entré, aunque sólo una vez, me las prometía muy felices, pero sólo podía estar tumbado, y reptar para entrar y salir me costó lo mío, no os creáis, por un momento pensé que mamacangreja tendría que tirar de mis manos o de mis pies para sacarme. Al menos mis esfuerzos para salir fueron fuente de risas durante un rato, así que me alegro de haber contribuido a la diversión.

La diversión duró un buen rato, hasta que cangrejin decidió que se podía tirar sobre las cajas, y claro, una era más endeble y quedó bastante chafada, aunque la otra, la blanca duró un rato más.

Ya sabéis, si os cambiáis de nevera o de lavadora, que os lleven la caja, vuestros hijos os lo agradecerán, y seguro que será algo que recordarán en el futuro. 

¿de pequeños os hicisteis algún fuerte con cajas?