La información anodina nunca es noticia y hay que revestirla de peculiaridad y cierta relevancia. El domingo comienza oficialmente el verano. He ahí el sucinto, veraz e intrascendente acontecimiento que para algunos significa calor, vacaciones, tedio, atascos, intoxicaciones alimentarias, playas atiborradas de bañistas, moscas y demás inconvenientes para quien no gusta de la interrupción preestablecida de sus hábitos, cual obsolescencia programada de un aparato. O el pistoletazo de salida para la diversión, el descanso, los amigos, la familia, las escapadas, las lecturas, los viajes y esas mil actividades ansiadas y vedadas el resto del año. Cada año igual, para unos y otros, digan lo que digan los periódicos y otros medios. Para todos, en cualquier caso, ya vivimos un verano más. Lo importante es superarlo. Suerte.
La información anodina nunca es noticia y hay que revestirla de peculiaridad y cierta relevancia. El domingo comienza oficialmente el verano. He ahí el sucinto, veraz e intrascendente acontecimiento que para algunos significa calor, vacaciones, tedio, atascos, intoxicaciones alimentarias, playas atiborradas de bañistas, moscas y demás inconvenientes para quien no gusta de la interrupción preestablecida de sus hábitos, cual obsolescencia programada de un aparato. O el pistoletazo de salida para la diversión, el descanso, los amigos, la familia, las escapadas, las lecturas, los viajes y esas mil actividades ansiadas y vedadas el resto del año. Cada año igual, para unos y otros, digan lo que digan los periódicos y otros medios. Para todos, en cualquier caso, ya vivimos un verano más. Lo importante es superarlo. Suerte.