Si es la primera vez que usted lee algo como “profilaxis dental”, entonces es bueno que sepa que esa es la forma técnica de llamar a la limpieza de dientes que debemos hacernos periódicamente, para que algo tan importante como lo es la dentadura, nos acompañe durante toda nuestra vida en perfecto estado.
Son los fusibles del cuerpo
Los dientes son más importantes de lo que creemos. En Oriente, se considera que los dientes son como los fusibles que regulan correctamente el paso de electricidad por todo el cuerpo. Los fusibles están hechos para prevenir un posible incendio cuando la intensidad de la corriente que circula por un circuito eléctrico supera debido a un exceso de carga, un determinado valor, ocasionando cortocircuito.
Teniendo en cuenta que el cuerpo humano es un productor constante de electricidad y que el cuerpo es como un circuito electrónico por el que constantemente circula dicha electricidad, entonces tiene mucho sentido que nuestro cuerpo tenga fusibles que eviten posibles cortocircuitos por una sobrecarga de esa electricidad que nos recorre permanentemente.
Pero independientemente de esto, lo único cierto es que periódicamente, al menos una vez cada 6 meses, las personas deberían hacerse una adecuada profilaxis dental, de la mano de un profesional de la salud, que examine los dientes y les haga una limpieza profunda que permita remover el sarro o la placa dental que se acumula, por lo general, entre los espacios dentales o en aquellas zonas a donde el cepillado diario no es capaz de limpiar todo correctamente.
Unos buenos dientes son iguales a una buena salud
Una buena dentadura equivale a una buena salud dental y una buena salud dental refleja en muchos sentidos una buena salud general del cuerpo físico.
Si los dientes enferman, procesos que hacemos a diario como comer, pueden verse afectados gravemente. Y si dejamos de comer porque simplemente no soportamos el dolor en nuestros dientes, o porque incluso ya no tenemos dientes con los cuales masticar los alimentos, entonces ante la ausencia de alimentos en nuestro cuerpo, la salud comenzará a deteriorarse con facilidad.
La mala higiene oral hace que se acumule demasiada placa dental en cada diente, lo que puede llevar a la aparición de diversas enfermedades y patologías orales que pueden llegar a ser bastante graves. Con el paso del tiempo la placa dental acumulada se convierte en sarro y este es casi imposible de ser eliminado con el cepillado normal de nuestros dientes. Cuando este sarro se acumula más allá de los límites normales, puede ocasionar que la base de los dientes se debilite y comiencen a caerse por sí solos, incluso en personas muy jóvenes que no tienen en cuenta un correcto aseo bucal permanente.
La placa dental contiene bacterias que pueden causar enfermedades como la gingivitis o periodontitis, que consisten en la inflamación y el sangrado de las encías, lo que puede causar mucho dolor e impedir el consumir alimentos con normalidad.
Los dientes cumplen un papel muy importante y este papel es el de triturar los alimentos antes de que ingresen al organismo, dividiendo la comida en pequeños trozos que se mezclan con la saliva y que hacen que la deglución, es decir el pasar los alimentos, sea un proceso sencillo.
Cuando no podemos morder correctamente la comida, bien sea por dolor en las encías o porque no tenemos suficientes dientes, entonces debemos pasar la comida en trozos mucho más grandes, lo que puede provocar un atragantamiento que en el peor de los casos puede ocasionarle la muerte a una persona.
En casos menos extremos, el no poder masticar los alimentos de forma adecuada, hace que trozos más grandes de comida lleguen al estómago que debe esforzarse más para llevar a cabo el proceso inicial de la digestión.
Cuando no prestamos suficiente atención a nuestra dentadura y cuando olvidamos hacernos una adecuada profilaxis dental, sin saberlo, estamos incubando un problema hacia el futuro.
También envejecen
Los dientes al igual que todo el cuerpo, envejecen con el paso de los años y con el tiempo comienzan a perder su brillo, su fortaleza, y se hacen susceptibles de partirse con gran facilidad, más aún cuando no se les dan los cuidados adecuados.
Es muy importante mantener una buena higiene oral de forma diaria, preferiblemente con productos dentales de limpieza que no contengan flúor. Este cuidado dental que debe llevarse a cabo justo después de cada comida, es la base que permite que la placa dental se acumule en menor cantidad con el paso del tiempo.
Cuando hay menos placa dental, existe menos peligro para la salud bucal y si a una adecuada limpieza diaria de los dientes, se le acompaña con una visita periódica donde un especialista que haga una correcta y adecuada profilaxis, entonces se garantiza de esa manera el tener una boca saludable.
Así que ya lo sabe. Si aún es una persona joven, asegúrese de comenzar a cuidar sus dientes desde ya, porque cuando sea una persona mayor los va a necesitar mucho más de lo que se imagina.
La profilaxis dental hecha de forma periódica, al menos dos veces por año, garantiza la salud de nuestros dientes y por consiguiente, nos da la garantía de poder comer con tranquilidad toda nuestra vida, y bien sabido es que, quien come bien, vive bien.