Muchas de las mediciones que nos realizamos a diario se hacen a través de la piel. Dando un paso más allá, John Rogers y la universidad de Illinois, han creado una nueva clase de wearable, una calcomanía que se aplicaría directamente sobre la piel y controlaría parámetros como la temperatura, la hidratación, la tensión o la frecuencia cardíaca, informando de todo a través de una app móvil.
Y no sólo hablaríamos de enfermedades o de pacientes, podría ayudar incluso a un deportista, para estar informado al segundo sobre su correcta hidratación. O aplicarlo a un bebé, para monitorizar su temperatura y comprobar si tiene fiebre.
La calcomanía ha sido desarrollada por MC10, a partir de obleas de sicilio. Es de aplicación directa en la piel, y aunque aguanta en la piel dos semanas, es recomendable sustituirla cada 7 días, para evitar posibles dermatitis.
La compañía, especializada en mHealth, quiere probar su dispositivo en pacientes con esclerosis múltiple, párkinson o epilepsia, avanzando así hacia el tratamiento de enfermedades crónicas.
Vía e imágenes | ConSalud
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