He estado tentada de titular este post como "la desconexión en la pandemia" en una especie de honor a los títulos de la serie Bones, que si sois fans entenderéis la referencia, o algo como "la necesidad de la desconexión", pero he decidido ir más al grano. En parte porque asumir que hicimos esta escapada por esa razón sería erróneo.
¿Por qué escaparse a una casa rural de Portugal en un verano de pandemia? Podría daros mil razones Mr. Wonderful, pero la realidad es que hace unos años nos regalaron una caja de experiencias, de esas de Wonderbox, y en previsión de más catástrofes mundiales decidimos que teníamos que gastarla YA. Nuestra mejor opción fue la Casa de Santa Ana da Beira, en el distrito de Guarda, en Portugal.
Nuestra elección fue muy acertada, ya que está cerca de Salamanca, es una casa rural con muy poca ocupación y era un sitio ideal para la distancia social. Cada habitación tenía su propia entrada al jardín con piscina, por lo que no tenías que cruzarte con nadie por el pasillo, y todo estaba limpísimo y muy cuidado.
Además de hablaros de esto, os enseño el outfit que llevé ese día. Especialmente el precioso bolsito de DressLily con el que lo combiné. Porque, ya sabéis, si tiene cuadritos vichy lo quiero.
La Casa de Santa Ana da Beira es una pequeña quinta situada en un pueblo portugués al pie de la Serra da Estrela. El pueblo no tiene mucho que ver, pero la zona es ideal para amantes de la naturaleza. Tiene habitaciones amplias y cómodas y un encanto bucólico que solo poseen los hotelitos rurales. Pero lo mejor, sin duda, es su jardín. Es enorme, está repleto de flores, todo verde, con un cenador, un viñedo, una piscina, zonas de ocio...
Lo regenta una señora encantadora que te trata con mucho cariño desde el minuto cero. ¡Y tiene dos perretes! Una mamá, Kika, y su hijo, Fidel. Fidel es el que aparece conmigo en la foto. Para nosotros, que un hotel tenga perretes es garantía de calidad. Tenemos clarísimo que algún día queremos volver.
Tengo que decir que las cajas de experiencias son bastante difíciles de canjear, pero en este establecimiento no nos trataron de menos por ello y estuvimos estupendamente.
De la zona visitamos la sierra, que es lo icónico del lugar. En invierno es una estación de esquí y en verano tiene varias zonas de baño en lagunas. Y la visita fue... Bueno. Según me veis vestida en las fotos, así subí. ¿Queréis saber qué temperatura hacía ahí arriba? OCHO GRADOS. No me consoló ponerme un jersey, una chaqueta y un abrigo. Estaba destempladísima. Afortunadamente, al bajar al hotel no hacía esa temperatura y pudimos bañarnos en la piscina.
Del outfit os hablo poco porque es bastante básico. Pero es que yo suelo ser así de básica en la mayoría de días. Solo haré dos highlights: la blusa y el bolso.
Este verano me dio por cogerme una blusa crop top ajustada de manga abullonada. Oye, que no paré hasta que di con una que me gustara. Al final esta la encontré en rebajas en H&M, que tenían un montón, y estoy muy contenta porque combina con todo y es genial para ponértela con partes de abajo de talle alto. Le da un toque estiloso a cualquier conjunto casual.
El bolso, como ya mencioné al principio, es de DressLily, de otra de nuestras colaboraciones habituales, y me enamoré de él en cuanto lo vi. Me encanta la combinación de rafia y tela vichy. Este verano también la he visto mucho y me tenía prendada.
Fotos hechas por Manuel Laya / Luxmantica Photos
Top: H&M (sold out) (similar)
Shorts: Green Coast (El Corte Inglés) (similar)
Bolso / Straw bag: DressLily
Alpargatas / Espadrilles: Toni Pons