La segunda parte de la conferencia se centró en analizar el papel catalizador y liberador que en su momento desempeñó la serie televisiva de humor estrenada en ETB2 "Vaya semanita" (2003) en relación al conflicto vasco. El enorme poder legitimador y visual de los contenidos televisivos cautivó la atención de los espectadores hasta conseguir que los vascos "se rieran de sí mismos" y aprendieran a consentir una imagen social de ellos que, por qué no, a todos nos puede causar gracia. En definitiva, la tesis de fondo que llenó toda la charla y las intervenciones posteriores es que la ficción (ya sea novelada o televisada) es intrínsecamente ética, esto es, moralizante o desmoralizante, hasta el punto que "quien no va al cine, no puede decirse que viva en comunidad."
David Porcel