Una 'conexión neurológica' sería la artífice de la conversación humana

Por Ame1314 @UniversoDoppler

¿Por qué la conversación humana es algo que sucede tan fácilmente? Un nuevo estudio postula la idea de una especie de “mente fusionada” entre los participantes de una conversación. Los investigadores han encontrado que los cerebros de hablantes y oyentes, se sincronizan para conversar y que este acoplamiento “neuronal” es la clave para una comunicación efectiva.

Los científicos han considerado tradicionalmente hablar y escuchar como dos procesos independientes. La idea es que el discurso se produce en algunas partes del cerebro, incluyendo una región conocida como área de Broca, y es entendida en otros, como la región conocida como área de Wernicke. Sin embargo, estudios recientes sugieren que en realidad hay muchas más superposiciones. Por ejemplo, los interlocutores en una conversación inconscientemente empiezan a imitarse entre sí, adoptando similares estructuras gramaticales, nivel de lenguaje, e incluso posturas corporales.

“Este solapamiento ayuda a la gente a establecer un “terreno común” durante la conversación y puede incluso ayudar a predecir lo que el otro va a decir a continuación”, argumenta el psicólogo Martin Pickering de la Universidad de Edimburgo y su colega Simon Garrod de la Universidad de Glasgow. Algunos investigadores creen que las llamadas neuronas espejo, que actúan imitando el comportamiento de la persona que tenemos delante, podrían estar implicadas en estas interacciones.

Para probar algunas de estas hipótesis, un equipo dirigido por el psicólogo de la Universidad de Princeton, Hasson Uri, utilizaron imágenes de resonancia magnética (MRI) para comparar los patrones de activación cerebral de oradores y oyentes. El estudiante de posgrado Lauren Silbert se sometió a una resonancia magnética mientras que improvisaba una historia durante  15 minutos. La historia narraba diversas anécdotas de su vida, que incluían a dos niños peleando por quién iba a llevarla al baile de graduación y un encuentro con un el oficial de policía después de un accidente de coche. El equipo registró la historia de Silbert, utilizando un micrófono especialmente diseñado que filtraba el fuerte ruido de la máquina de resonancia magnética y, a continuación se reprodujo a 11 sujetos mientras sus cerebros eran también escaneados.

Los investigadores encontraron una notable sincronía entre los patrones de activación cerebral de Silbert y los de sus oyentes a medida que escuchaban la historia. Por ejemplo, cuando Silbert hablaba sobre su experiencia en el baile escolar, las mismas zonas se iluminaban tanto en su cerebro como en los cerebros de sus oyentes. En la mayoría de las regiones del cerebro, el patrón de activación en los cerebros de los oyentes llegaba unos segundos después de que se observara en el cerebro de Silbert. Pero una pocas áreas del cerebro, incluyendo uno en el lóbulo frontal, se iluminó antes incluso que en Silbert, tal vez representando que los oyentes eran capaces de anticipar lo que iba a decir a continuación.

Para asegurarse de que el acoplamiento no era un efecto experimental, el equipo también pidió a los 11  sujetos de la prueba y que habitualmente hablan en Inglés, que escucharan una historia en ruso, idioma que ninguno de ellos podía entender. Esta vez, los investigadores no vieron acoplamiento neural. Los investigadores también encontraron una correlación positiva entre la fuerza del acoplamiento y la facilidad con que los sujetos podían recordar  detalles de la historia que habían escuchado.

El estudio es “innovador”, dice la neurocientífica Riitta Hari de la Escuela de Aalto en la Universidad de Ciencia y Tecnología en Espoo, Finlandia. “Esto demuestra cuán estrechamente el funcionamiento del cerebro de un hablante y un oyente se conectan durante la comunicación con éxito,  y demuestra que los oyentes son jugadores activos y no sólo receptores pasivos.” Pickering está de acuerdo en que el documento es “muy importante y original”, y agregó que “es una prueba evidente de que el acoplamiento neuronal subyace en la manera que los hablantes llegan a entenderse entre sí.”

Pero el neurocientífico Michael Arbib de la Universidad del Sur de California en Los Ángeles, dice que los resultados serían más convincentes si el equipo habría escaneó los cerebros de dos personas que conversaban en tiempo real. Hasson dice que es el próximo paso: “Estamos trabajando en una configuración que nos permitirá grabar dos pistas de escaners al mismo tiempo de dos personas conversando”

Autor: Michale Batler.

Enlace original:  “Mind Meld” enables good conversation.

Para saber más: Neuronas espejo.