Una dama nunca miente, Juliana Gray

Publicado el 11 marzo 2013 por Miss_cultura @miss_cultura
1890. Tres damas inglesas deciden tomarse unas largas vacaciones en el extranjero: Mientras que lady Alexandra Morley tiene poderosas razones para cambiar Londres por un lugar más tranquilo y solitario, los motivos que impulsan a su prima Lilibeth a abandonar el hogar familiar, acompañada de su hijo, son aún más imperiosos. Y por último, Abigail, la hermana de lady Alexandra, está a punto de convertirse en solterona y poco le importa ausentarse de la vida mundana. Por otro lado, el brillante científico Finn Burke, embarcado en un insólito proyecto que necesita perfeccionar durante unos meses, decide visitar a sus amigos el duque de Wallingford y su hermano Roland en su residencia londinense para hacerles una proposición. Consciente de la dudosa reputación de de los dos aristócratas y del lamentable estado de sus finanzas, les sugiere alejarse de las tentaciones de la capital e instalarse durante un año en una campiña remota. El azar querrá que todos ellos coincidan en el mismo castillo de la Toscana, rodeado de la magia del paisaje italiano. Y cuando la chispa del amor prenda entre lady Alexandra y Finn, el romántico lugar se convertirá en el escenario de una serie de peripecias escandalosas que darán al traste con los planes de los seis viajeros.

Juliana, hace que ser mujer en el siglo diecinueve, principios del veinte, sea divertido, sea una aventura y sobre todo sea un choque de diálogos frescos, originales...De Inglaterra nos vamos a Italia, en un viaje del cual sabemos poco o nada, pequeñas pinceladas al principio del libro aquí y allá, haciendo que me intrigase este cambio repentino de una vida bulliciosa a una vida tranquila. Los personajes que Juliana nos muestra son tres mujeres con un niño, Philip, que ha hecho mis delicias y tres hombres que parecen conocer muy bien a Lady Morley, sintiendo animadversión hacia ella, desde que la ven. Es una historia llena de pequeños detalles que han hecho de mi lectura una verdadera delicia, como es el caso, de la introducción por parte de la autora a la protagonista Alexandra en el mundo del automovil, y es que Finn (Irlandés) es un estudioso e inventor que ahora esta interesado en un vehículo que no haga ruido, con mas velocidad...y el castillo de la Toscana es el lugar idóneo para estudiar y crear algo singular, pero no contaba con que todos se iban a encontrar en el mismo sitio, a la misma hora y que alguna dama podía hacer que todo se tambalease. Finn, tiene sangre irlandesa y se vera en su temperamento y su manera de ser, en cambio Alexandra es la típica dama, que a simple vista parece tonta, pero tras esa fachada se esconden muchas cosas que como lectora me ha gustado conocer y entender. Los personajes secundarios son un tanto atípicos, Juliana ha creado a dos personajes que os sorprenderán mucho al final, yo cuando pienso en ellos, sonrió como una tonta, y es que me deje engañar. La pluma de esta autora sorprende por su sencillez, sin grandes florituras, ha hecho que la mujer en ese siglo de la mano de Finn, se sienta importante, colabore en algo mágico. Dos personajes me han exasperado y han sido el duque de Wallingford y Roland, les hubiera dado un puntapié desde que abrieron su boca y empezaron a decir insensateces , pero sin ellos, esta historia no hubiese tenido la fuerza y  las situaciones mas disparatadas que he leído hace meses. Algo que me ha dejado confusa, y en la siguientes entregas pienso,creo...que la autora puede explicar son algunas escenas como la del plumón, el comportamiento de Lilibeth y su pasado, que no hace mucho incapie, pero siempre esta presente y es que se me han escapado de las manos pero,tras unas semanas sin ganas de leer, "Una dama nunca miente" me ha aportado tales sonrisas y una historia de amor de las de tira y afloja, que no os dejaran indiferentes,y que nada mas cerrar el libro, me he comprado en ingles ,el siguiente.
 -Ve a dormir ,Alexandra. Ya me las apañare.-De ninguna manera.

*Agradecimientos a la editorial.