Una de alimentación (I)

Por Teresa Escudero Ozores
Os voy a colgar por partes la copia de un Pdf realizado por Julio Basulto, sobre alimentación de 0 a 3 años... ORO PURO, como todo lo que él hace, espero que lo disfrutéis tanto como yo.
Durante las sesiones de la guía Recomendaciones para la alimentación en
la primera infancia (de 0 a 3 años) se recopilaron las preguntas más
frecuentes que formularon los asistentes. En este documento se da
respuesta a estas dudas y se incluyen los enlaces a las fuentes bibliográficas
de soporte y agrupados por los temas siguientes:
Lactancia
1. ¿Los bebés c u y a alimentación es de lactancia materna exclusiva tienen anemia ferropénica?

La mayoría de bebés nacen con unos depósitos de hierro
adecuados (aunque pueden estar más o menos llenos en función
de prácticas como por ejemplo el pinzamiento del cordón
umbilical en el momento idóneo) para cubrir sus necesidades
durante los primeros seis meses de vida. Pasado este
tiempo, a pesar de que la leche materna es pobre en hierro,
este hierro se absorbe de forma muy eficiente (recordemos que
la leche de vaca también es pobre en hierro, el cual es muy poco
biodisponible) y se complementará con la incorporación de
otros alimentos ricos en hierro.
Las recomendaciones de salud pública sobre lactancia materna
tienen en cuenta todos los beneficios y riesgos de la práctica y,
por lo tanto, la recomendación que mejores resultados en salud
evidencia es la lactancia materna exclusiva y a demanda hasta
los 6 meses, complementada con otros alimentos (ricos en
hierro) a partir de esta edad y hasta los 2 años (o hasta que la
madre y el hijo lo deseen). Hay que recordar que la
suplementación con hierro de la madre no p r o v o c a
variaciones en los niveles de hierro de la leche materna.

2. ¿Si la madre da el pecho, ¿hace falta dar leche o yogur?

Cuando la lactancia materna es todavía frecuente no es
necesario ofrecer leche ni yogur, ya que la leche materna
garantiza la aportación de calcio y proteínas (entre otros).
Cuando la ingesta de leche materna se reduce mucho, debe
garantizarse la aportación de alimentos ricos en calcio
(leche, yogur, queso tierno, legumbres, almendras y otros
frutos secos; en este caso, triturados o molidos para
evitar el riesgo de atragantamiento).

3. En caso de que no se dé el pecho, ¿hay recomendaciones concretas sobre la forma de dar el biberón para que el bebé tenga que mamar y, por lo tanto, se garantice el respeto a la sensación de saciedad?

Se recomienda utilizar los biberones que intentan reproducir
el ritmo de eyección de leche del pecho. Existen
recomendaciones sobre cómo llevar a cabo la alimentación
con biberón para que sea más fisiológica con aquellos bebés
que también se alimentan de leche materna. En este caso,
hablamos de lactancia mixta, pero los consejos podrían ser
extrapolables y favorecer un mejor reconocimiento de la
sensación de saciedad.
Además, se recomienda dar el biberón de la manera más
parecida posible al pecho: hablando a los bebés, mirándolos,
cambiando de brazo (también darlo con el brazo izquierdo,
aunque a los adultos les cueste, para estimular ambos
hemisferios cerebrales), y siempre respetando el ritmo de
succión y las señales de saciedad del bebé. Los horarios y las
cantidades son a demanda, igual que con el pecho.
Otro consejo que se puede dar es que vayan cambiando de
marca, porque nutricionalmente no hay mucha diferencia y así
se acostumbran a sabores distintos (igual que con la lactancia
materna cambia el sabor de la leche según lo que haya comido
la madre).

Alimentación complementaria

4 ¿Cuántos días hay que dejar pasar después de incorporar
un alimento y antes de ofrecer otro?

A fin de poder observar posibles reacciones adversas, la guía
de la ASPCAT indica esperar entre tres y cinco días, que
es la recomendación del Pediatric Nutrition Handbook, sexta
edición, de la Academia de Pediatría de Estados Unidos.

5 ¿Cuándo se puede incorporar el huevo? ¿Hay que ofrecer primero la yema y después la clara?

Actualmente, no existe ninguna justificación para atrasar la
incorporación de un determinado alimento ni de partes de
este alimento. A partir de los seis meses, se pueden
incorporar todos l o s alimentos, también los potencialmente
alergénicos.
6 ¿A qué edad se puede incorporar el bacalao? ¿No es mejor ofrecer primero el pescado blanco que e l a z u l ?
Actualmente no existe ninguna justificación para atrasar
la incorporación de un determinado alimento. A partir de los
seis meses, se puede incorporar cualquier tipo de pescado (el
bacalao tiene que ser fresco, no salado).
7 ¿Se pueden ofrecer cereales integrales a partir de los seis meses?
Efectivamente, el pan, el arroz, la pasta, etc., si son integrales
resultan más nutritivos y más saludables; por lo tanto, en el
marco de una dieta saludable y variada, son preferibles.
8 ¿Se pueden ofrecer seitán y alimentos a base de soja a partir de los seis meses?
Efectivamente, a partir de los seis meses se puede ofrecer
cualquier alimento, también los que contienen gluten
(seitán) y l a s legumbr e s y d e r i vados (soja).
9 En el caso de los bebés que a partir de las dieciséis semanas van a la escuela infantil, ¿cuál es la recomendación dietética a seguir?
El hecho de que el bebé vaya a la escuela no tiene que
comportar el abandono de la lactancia materna. La
recomendación es siempre lactancia materna exclusiva hasta
los seis meses, y a partir de entonces mantener la lactancia
e incorporar, gradualmente, nuevos alimentos. En caso de que
la madre no pueda o no quiera ir a la escuela infantil para
alimentar al bebé o bien dejar leche materna en la guardería
para que las educadoras la administren con biberón, se
pude optar por ofrecer leche de continuación 1 u ofrecer
alimentos diferentes de la leche (nunca antes de las diecisiete
semanas). Esta última opción idealmente debería tener
en cuenta el grado de desarrollo neuromotor del bebé
(signos que indiquen que el bebé está preparado para recibir
alimentos complementarios).
10 En los jardines de infancia, a la hora de introducir otros alimentos, ¿hay que eliminar una toma de leche o hay que combinar la leche y los nuevos alimentos?
Durante el primer año de vida, la leche materna (o en caso de que no se
pueda dar leche materna o no se quiera, la leche artificial)
debe ser la principal fuente de calorías y nutrientes de la
alimentación del bebé. En la escuela infantil, debe
garantizarse la aportación de leche, aunque la
estructura de la comida vendrá determinada por la
organización y las posibilidades de cada centro.

11 En el caso de los bebés de cuatro meses que no quieren biberones, ¿qué alternativa se recomienda?

Durante el primer año de vida, la leche materna (o en caso de
que no se pueda dar leche materna o no se quiera, la leche
artificial) debe ser la principal fuente de calorías y nutrientes de
la alimentación del bebé; por lo tanto, si el bebé no quiere
beber leche con biberón, debe garantizarse la aportación a
través de otros medios (cuchara, vaso...).
12 En los casos de madres que piden dar complementos (como papillas sin gluten) a partir de los cuatro meses, ¿qué se recomienda?
Durante los seis primeros meses, la
recomendación es dar leche materna exclusiva a demanda
(o
en caso de que no se pueda dar leche materna o no se
quiera, la leche artificial, también exclusiva y también a
demanda
). En caso de que la madre no pueda o no q u i e r a
mantener la lactancia materna exclusiva hasta los seis
meses, que es la recomendación, se puede optar por ofrecer
leche de continuación 1 o bien se pueden ofrecer alimentos
diferentes a la leche,
sin que eso suponga un riesgo (pero
también sin que aporte ninguna ventaja) a partir de las
diecisiete semanas, nunca antes
. Esta última opción,
idealmente, debería tener en cuenta el grado de desarrollo
neuromotor del bebé (signos que indiquen que el bebé está
preparado para recibir alimentos complementarios).
13 ¿Qué piensan de los yogures adaptados con leche de continuación?
Son totalmente innecesarios, ya que los bebés de menos de
un año no necesitan consumir yogures.
Además, a partir de
los ocho o nueve meses
pueden empezar a comer
pequeñas cantidades (unas cuantas cucharadas) de yogur
natural (sin azúcar).
Debe recordarse, también, que l o s
y o g u r e s adaptados con leche de continuación diseñados
para los bebés a partir de seis meses llevan azúcares
añadidos.


14 Las manzanas, ¿cuándo se pueden introducir?
Rayadas, a láminas finas o en puré, a partir del sexto mes,
como cualquier otro alimento. La manzana   e n t e r a no
debería ofrecerse hasta los 3 años, por el riesgo de
atragantamiento.
15 Las setas, en la alimentación del bebé, ¿cuándo se pueden introducir?
A partir de los seis meses, como el resto de alimentos.

16 ¿Cuál es la recomendación de introducción de la sal?

La población de nuestro entorno consume un exceso de sal
(9,8 gramos/día en contraposición a los 5 gramos/día
recomendados). Este problema también se da en los niños;
por lo tanto, hay que moderar su utilización e intentar no superar
los 5 gramos al día recomendados, teniendo en cuenta que
cerca del 75% del sodio consumido proviene de los alimentos
procesados, y no de la sal que añadimos a las
preparaciones. En los niños, así como para toda la familia, la
recomendación es priorizar los alimentos frescos y
mínimamente procesados, y reducir al máximo la
utilización de sal (la cantidad máxima diaria entre alimentos
y sal añadida equivale a una cucharadita de café). Además,
esta debe ser yodada.
Texturas
17 ¿Se ha detectado un posible incremento de las urgencias por atragantamiento de bebés al introducir alimentos sin triturar demasiado pronto?

 Los estudios demuestran que la denominada alimentación complementaria a demanda
(baby-led weaning), según la cual el bebé coge los alimentos él mismo, no supone más atragantamientos que una alimentación con purés y triturados. Es necesario, eso sí, y en
cualquier tipo de práctica, evitar los sólidos con riesgo de atragantamiento.

18 ¿Cómo se puede pasar del pecho a los trocitos directamente a los 6 meses de edad?
En la alimentación complementaria a demanda (baby-led weaning) se ofrecen alimentos blandos y bien cocidos, que el bebé es capaz de comer sin masticar o bien aplastándolos con las
encías. A pesar de que la cantidad que ingiere es, a menudo, poca, la ingesta calórica y nutricional está garantizada por la leche.

19 ¿Por qué se hace referencia a los 6 meses como fecha de introducción de los alimentos troceados o en puré? ¿Tiene que ver con la salida de la dentición?

Hasta los 6 meses, se recomienda lactancia materna
exclusiva. A partir de este momento, la mejor referencia para
iniciar la alimentación complementaria es su interés y su
desarrollo neuromotor. Está preparado si se sienta (con ayuda,
en el regazo, por ejemplo) y aguanta la cabeza con firmeza,
coordina mirada, manos y boca para mirar el alimento,
cogerlo y ponérselo en la boca, y puede tragar alimentos
sólidos (ya no tiene reflejo de extrusión). En la mayoría de
bebés, estos logros no se suelen producir mucho antes de los
6 meses. En cambio, hay bebés más mayores (8 meses) que
no están preparados para aceptar nuevos alimentos hasta los
8 meses.

20 ¿Por qué se introducen los alimentos sólidos con riesgo de atragantamiento más adelante?

Algunas fuentes citan los 3-4 años como fecha recomendada
para incorporar alimentos sólidos que suponen un riesgo de
atragantamiento, mientras que otras no lo
recomiendan hasta los 5 años.
 La razón es que hasta estas edades el proceso de masticación todavía no puede
garantizar que se evite la aspiración pulmonar de determinados alimentos que por su forma y consistencia pueden salir disparados hacia la vía respiratoria.