Una de esas joyitas: Eduardo Bort

Publicado el 10 abril 2010 por Victorhugo
Hoy iba a hablar de algunas de las cosillas recientes que he pillado por ahí (todo de legal), pero al rebuscar un poco por mis estanterías finalmente me he decidido a comentar y hacer una entrada dedicada a un artista y a un disco de los que hacen afición.

Empecemos la historieta con un agradecimiento especial por haberme dado a conocer este disco a una cosa que se llama Youtube: entre otras mañas, una herramienta indispensable pues me permite lo que en baloncesto se llama hacer scouting: analizar y rastrear verdaderos clásicos de la música desconocida o extraña, en especial de los años en los que los chicos llevaban melena, las chicas no utilizaban sujetador y las palabras paz y amor resonaban por todos lados.
Pues así es como me topé de frente con el músico valenciano Eduardo Bort y una composición suya titulada Thoughts-Pensamientos.
Y ahí quedo este encuentro: anotado entre mis desordenados papeles, siempre repletos de nombres de grupos, artistas y algún que otro "monumentonacional" como Amanda Righetti (ahí lo dejo caer sutilmente).
Entonces, pasado un tiempo y durante las vacaciones de verano, ocioso como siempre, decidí darme un paseillo por unas conocidas tiendas de electrodomésticos que se publicitaban con la imagen de una persona con sobredotación intelectual (si no sabéis cual, mejor para vosotros). Después de entrar y pasarme por la sección de Novedades Nacionales sin mucha novedad, me acerqué a la sección de Internacional a ver que nuevas me traían...y ¡¡¡Oh sorpresa!!! Detrás de un disco de los Jonas Brothers me encontré con esta joyita de Eduardo Bort. El corazón se me aceleró y me lo pillé, por ¡¡¡5 Euros!!! Y yo que desconfiado creía que si alguna vez iba a tener entre mis manos este álbum sería en una tienda hiperespecializada de blablabla y tras pedir un préstamo. Pues nada de nada, en edición digipack y remasterizada... un lujo.

Ya en casita le puse el disco a mi padre y resulta que no lo conocía (já, otra victoria más que apuntar) y nos sentamos en el sofá del salón a escucharlo, lo pusimos a todo trapo y ahora, después de la charleta que os he soltado, es cuando viene el análisis-comentario:
Lo primero que debemos decir es que este álbum se grabó en el año 74, con lo que ya es meritorio el grabar una obra de esta planta en esos tiempos que corrían. Además, por lo que he leído por ahí este trabajo es considerado por muchos (con gran acierto creo) como una de las culminaciones del rock-progresivo de España. Una afirmación u opinión realmente importante si tenemos en cuenta que estamos hablando de un territorio musical por el que se movían grupos encuadrados dentro del llamado Rock Andaluz como Triana, Alameda, Storm u otros como Los Módulos en Madrid o Iceberg en Cataluña. Es decir, no estamos hablando de tonterías.
Es este LP de debut una obra maestra ejecutada por Eduardo Bort, músico valenciano dotado de un gran talento en cuanto a las tareas de producción (se recorrió y trabajó en los mejores estudios de Europa) y en cuanto a la interpretación, pues es un maestro de las guitarras.
En resumen, este trabajo es un verdadero compendio musical de lo que se hacía por entonces, ya que (ahora los amantes de las etiquetas van a disfrutar) entre las canciones de este plástico surge la perfecta unión de estilos como una Psicodelia española ya tardía, Space-Rock, Rock Progresivo y Sinfónico (con toda la parafernalia de mellotrones, sintetizadores, mini-moog, pianos eléctricos y no, órganos y teclados de todo tipo, como debe ser), golpes de Rock Duro, pasajes Folk y breves pinceladas de Jazz-Rock,... Sólo le faltaba unas gotitas de Pasodoble y Reggaetón al asunto.

"Thoughts-Pensamientos Pt 1 y 2" son las dos primeras pistas del álbum y aparecen engarzadas formando una única composición de unos 8 minutos de duración aproximadamente que se abre con una guitarra acústica que parece el inicio de un tema folkie donde hacen acto de presencia unas campanas tubulares realmente curiosas, pero que luego se entremezcla con un juego sintetizadores increíble que acaba dando paso a la segunda parte, donde destacan por encima de todo los cambios de ritmo (una constante a lo largo de este álbum) a la manera de los primeros Black Sabbath y que se va tornando y orientando más hacia el Hard Rock o Heavy como se aprecia en el empleo de agudas voces y de una instrumentación más contundente liderada por el baterista Vicente Alcañiz y la guitarra de Eduardo. La explicación que he hecho es confusa, lo sé y lo siento, pero para eso afortunadamente están los audios...

Tras este entrante aparece la pieza central del disco, "Walking On The Grass-Paseando Sobre La Hierba", que se inicia de forma mansa y apacible, con unas etéreas voces flotando sobre un lecho de guitarras acústicas y flautas que nos traen ecos del Talk To The Wind de los británicos King Crimson. A partir de aquí se inicia una ruptura y surge otra sección realmente preciosa, mágica y muy magnética (mesmerizante he llegado a leer por ahí) en el que los protagonistas a mi parecer son las voces superpuestas, en una magistral demostración de saber hacer en la producción, y una impecable ejecución musical en la que la labor del bajista Marino Hernández es impagable. Al igual que la última parte de esta composición, que nos muestra de nuevo el dominio en los cambios de ritmo y una soberbia guitarra que nos trae recuerdos del también genio Tony Iommi en sus momentos más salvajes.

Y ahora es cuando, tras el abrupto final, irrumpe la que es para mí la pieza esencial del disco, y por ello mi favorita: "Pictures Of Sadness-Cuadros De Tristeza", con una maravillosa apertura acústica y de sintetizadores. Si leéis por ahí más cosas de este disco, encontraréis muchas menciones a que las letras están cantadas en inglés pero con un acento español que tira para atrás (pero no os preocupéis que no es tan escandalosamente escandaloso como lo del Príncipe Gitano y el "In The Ghetto" o lo de los Gipsy Kings y su memorable tributo al "Hotel California"). La verdad es que a mí eso no me sucede, me parece algo anecdótico o supérfluo. Además, no creo que muchos españolitos de hoy día puedan presumir de dominar la lengua de Shakespeare). La letra de esta canción es tremendamente simbólica, abstracta o directamente flipada, porqué no decirlo, pero sin duda también es bella y emotiva.
Si esta canción es la más accesible del disco es debido en parte a su corta duración (algo que agradecerán los tiquismiquis) y por tener uno de los riffs de guitarra eléctrica más guapos que he escuchado nunca: evocador, con reminiscencias medievales y románticas.

Las dos últimas composiciones son "Yann" y "En Las Riberas Del Yann", piezas que muestran de nuevo el gusto por todo lo relacionado con los sintetizadores y que en cuanto a cuestiones rítmicas nos acercan levemente al Jazz-Rock o Jazz-Fusión de gente como la Mahavishnu Orchestra de John McLaughlin, pero sin violín eléctrico de por medio.
Poco más se puede decir, salvo que si podéis os hagáis con el disco, claro...