Una de Patrañas: La publicidad ecológica engañosa o Greenwashing

Por Paco Maestre @Elbiocultural

Ya sabéis que este blog esta muy preocupado por ese marketing “malo” que rodea a ciertos productos ecológicos, esas falsas etiquetas que se les añaden y cualidades que en algunos casos hacen que tengamos que pagar más al adquirirlos respecto a un producto no ecológico, o bien atribuir cualidades ecológicas a productos que no lo son, más bien todo lo contrario y que el fabricante se encarga de enmascarar  su producto dentro de un concepto verde para mejorar la percepción positiva de dicho producto e inducir a su compra.

Así el Greenwashing o la publicidad ecológica engañosa en los últimos años se esta convirtiendo en una practica altamente extendida en el sector del marketing (los que venimos de el lo sabemos de sobra), aprovechando el fuerte tirón que presenta la adquisición de productos con cualidades saludables, no contaminantes, que favorecen la sostenibilidad, incluso que curan enfermedades y el fuerte alza que esta experimentando el sector ecológico, se están diciendo autenticas patrañas e induciendo a los consumidores a adquirir ciertos productos con supuestas cualidades falsas y que realmente no posee el producto o bien hacer auténticos lavados de cara de empresas señaladas socialmente como contaminantes o con productos no muy saludables, o de baja calidad.

Este publicidad ecológica en muchos casos es utilizada con especial habilidad y sutileza por los fabricantes, vamos a hacer un repaso de ello con varios ejemplos genéricos:

  • Las grandes eléctricas, por ejemplo. os habréis fijado que últimamente sus publicidad esta llena de arboles, bosques, montes, sus logos son verdes, todo son parques eólicos o solares. Cuando as bien es todo lo contrario, ya que se calcula que solo un 15% de su producción es renovable.
  • Internet, ebooks, tablets y demás cacharros electrónicos aportan también valores sostenibles, ya que nos ahorramos mucho papel  y por consiguiente dejamos de talar arboles, lo que no te cuentan es los compuestos tóxicos con los que están fabricados, ya te lo contamos en nuestra entrada dedicada a la e-waste o basura electrónica,  de donde procede la energía necesaria para su funcionamiento, que ocurre si no se reciclan correctamente y un aspecto muy importante, el empleo de la obsolescencia programada con el que nos obligan a renovar el producto , limitando su vida útil y haciendo de su reutilización algo imposible.
  • Otro mito fabulado con habilidad es el coche eléctrico. Todos los coches hoy soy respetuosos con el medioambiente, sus emisiones son mínimas, ect..falso!  No existe un cohe ecológico a día de hoy, lo más cercano son los modelos propulsado por una pila de hidrógeno que están todavía en una fase cercana a la experimental, aunque ya hay alguno circulando. Los modelos actuales con batería de litio, no generan emisiones directamente, pero si de manera indirecta, puesto que la electricidad con la que se cargan procede de la quema de combustibles fósiles, además las bacterias son altamente tóxicas y difíciles de reciclar correctamente. Ya no hablemos de los modelos híbridos y demás inventos, por no contar la huella de carbono que generan en su fabricación.
  • Terminaremos con el tema de los alimentos ecologicos, productos de limpieza, cosmeticos….. y todos aquellos sucedáneos que se han apuntado al carro últimamente, eso que se viene a llamar productos naturales. Olvidaros de toda esa parafernalia, sino llevan el sello de la certificación ecológica europea y de la región en que se ha producido no es ecologíco. Recordad que los productos ecológicos no son medicamentos, no curan enfermedades, pueden ayadarnos a estar más sanos, desde luego, pero por si mismos no son ningún remedio que justifique tener que pagar un precio desorbitado y tener que adquirirlos en lugares especiales, no caigamos en el reclamo de las grandes superficies que con habilidad y aprovechando las ventajas organolépticas de estos los han situado en la categoría de productos gurmet, elevando sus precio.

Logo Ecológico que certifica el origen ecológico de tus compras

Que un producto contenga una determinada sustancia de origen natural, no quieres decir que el resto del producto sea natural y mucho menos ecológico. Fijémonos bien en las etiquetas, descubrirás que seguramente pagas más por un producto natural que por uno que no lo es y resulta que ninguno de los dos lo es.

Si queréis saber más del temo os dejo este enlace que me ha parecido de lo mejor que he ledo sobre el tema.