Una escala larga en doha, qatar

Por Alejandra Castro Nuñez @alejama66
¡Hola amigos! Hoy les voy a contar mis quince horas en la ciudad de Doha, Qatar. En primer lugar les cuento que llegué aquí como casi todos los viajeros, haciendo una escala con la compañía aérea de Qatar Airways,  para luego seguir de viaje a Myanmar. Nosotros nos hubiéramos conformado solamente con disfrutar de un té en el zoco, pero  al ser una escala larga en horas, tuvimos la suerte que Qatar Airways nos regaló un city tour de tres horas en un mini-bus por toda la ciudad, con  guía incluido  que nos explicó los principales monumentos y atracciones. Sinceramente yo no suelo consumir "City Tours" pero debo reconocer que si deseas tener una primera impresión a vuelo de pájaro de la ciudad, están muy bien. 
Convenimos con el responsable del grupo que antes de regresar al aeropuerto nosotros nos quedaríamos en la ciudad, por consiguiente tuvimos que pagar la VISA ON ARRIVAL (28 U$S) solo con  tarjeta de crédito y no aceptan efectivo

Bahía de Doha 
Cuando sabía que me tocaba escala en Doha, yo iba muy prevenida (pelín asustada) con referencia al clima, pues el año anterior cuando estuve en Dubai por desgracia me agarro un golpe de calor y lo sufrí bastante, pero tuvimos mucha suerte, en la ciudad estaba lloviendo de a ratos y la temperatura no superó los 25 grados. También minutos antes de subir al bus como se disputaba un campeonato deportivo de "rugby" en Qatar nos obsequiaron balones y camisetas con esa publicidad jajaja así que todo marchaba bien.

Y ahora por donde voy 
  • City Tour: 
Salimos del aeropuerto con lluvia y la primer parada fue el Museo de Arte Islámico que alberga la mayor colección de arte islámico del mundo. Aquí nos sacamos la foto junto al museo y los barcos pesqueros dhow muy típicos de la zona  y de nuevo en marcha .  Luego fuimos a la city, con los rascacielos de cristal, el edificio estrella es el Burj Qatar ese  parecido a la Torre Agbar de Barcelona, todo sin descender del bus.  A la hora del recorrido llegamos al Centro Cultural Katara donde se encuentran varias mezquitas y dos torres de barro y madera con huecos llenos de palomas. 

Katara Village 
Doha me pareció una ciudad de contrastes, donde conviven el dinero a la enésima potencia y la pobreza, no extrema, pero muy presente. La riqueza se ve en la zona de "The Pearl of Doha -La Perla" una zona exclusiva con comercios de las mejores marcas del mundo, edificios de lujos y en su puerto deportivo unos yates de ensueño.Muchos de estos terrenos son artificiales ganados al mar.


 The Pearl of Doha

El final del tour es la visita al zoco donde  visitamos el  mercado Souq Waqif  de especias, alimentos, animales, artesanías y ropas. Para mí fue la zona mas autentica, donde se veían las familias enteras. Aquí esta lleno de bares, teterías, puedes fumar  shisha y restaurantes. Pudimos almorzar algo muy liviano y comprarnos unas ropas de la zona. La gente es muy generosa, nos invitaban a comer, fumar, beber, me sentía gratamente sorprendida. 


Souq Waqif 
  • Nuestro paseo por libre
Antes de quedarnos en la zona del zoco, nuestro guía, un inmigrante nepalí, comprobó nuestros pasaportes por si teníamos las visas y nos dejo partir jajaja sin antes preguntarle el precio aproximado que nos puede cobrar un taxista hasta el aeropuerto, para evitar sorpresas y pactarlo antes de subir.   Nos metimos por todos los callejones y desembocamos en una enorme plaza donde se podía ver a lo lejos el mar.  Comenzaba a agobiar un poco el calor y nos marchamos a la Corniche , esa avenida al lado del mar, allí nos sentamos y observamos que  los hombres  van caminando tomados de la mano, es una costumbre que no tiene nada que ver con la orientación sexual, y recordé que lo había visto en algún programa de la televisión.  Al regresar al bazar ya siendo  la tarde era  la hora de la venta de todo tipo de animales, especialmente pájaros, los pasillos se llenaban de vendedores y familias con muchos niños, es increíble ver el rostro de los niños embelesados con los animalitos, todo un entretenimiento. 

Las quince horas llegaban a su final, con la sensación  para mí que  Doha es un lugar  en constante crecimiento, hay maquinarias por todos lados, se nota que se  invierte demasiado dinero, se construyen cientos de edificios, pero a pie de calle noto fuertemente la diferencia de clases sociales, entre el local y el inmigrante trabajador. Sinceramente aunque nuestros pies estaban en tierra qatarí nuestras mentes estaban en llegar a Yangon y quizás por ello la sentí  una ciudad de paso transitorio. 
El final: Nos dirigimos al aeropuerto internacional Hamad, sin  ningún problema con el precio pues lo pactamos con el taxista de antemano, tal los consejos de nuestro guía. 


Fotos y Textos de Alejandra Castro Nuñez, excepto mención especial.
 ©viajarcuesteloquecueste.com
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