Una imagen mejor que mil palabras

Publicado el 27 septiembre 2013 por Mer
Los pequeños detalles... a veces se nos olvidan... y resulta que son los que hacen lucir más o menos un trabajo.
Como en el caso de la bufanda rosa que tejí el pasado invierno. Después de toda la tarea, no me gustaban los bordes ya que los puntos finales quedaban demasiado holgados. Así que decidí hacer algo al respecto. No sabía muy bien cómo solucionarlo pero encontré el modo probando... Lo comparto con vosotros por si os pudiera resultar de utilidad.

Tomando dos puntos con la aguja de ganchillo

No hace falta nada más que una aguja de ganchillo.
Ni siquiera es necesario utilizar lana (que por cierto, no me quedó ni una hebra).
Y ahora, hay que hacer una cadeneta por el borde, tomando el último punto de cada fila. Eso es todo.
Es difícil de explicar, pero muy fácil de realizar. Creo que las imágenes pueden mostrarlo mejor que todas las explicaciones que os pueda dar.

Introduciendo un punto en el otro con la aguja de ganchillo


Al final, una pequeña puntada y listo.
Ahora sí queda bien rematado. Esto ya es otra cosa.

Sacando el punto resultante con la aguja de ganchillo


Borde de la bufanda con su cadeneta como remate



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