Una llama entre cenizas~ Sabaa Tahir ~448 páginas || 17'95€ || MontenaRústica con solapas || 9788490434727
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Laia es una huérfana que lucha por salvar a su único hermano. Elias es un soldado que lucha por su libertad. Y ambos descubrirán que el Imperio sólo puede vencerse desde dentro...
En un mundo regido por la ley marcial de la Roma Antigua, el precio de la desobediencia es la muerte. Laia y su familia sobreviven en los callejones más pobres, sin cuestionar el orden establecido. Han visto lo que les pasa a quienes se atreven a desafiarlo.
Cuando encarcelen a su hermano por traición, Laia se verá obligada a acudir a la resistencia. A cambio de su ayuda, deberá espiar para ellos en la Academia Militar. Allí conocerá a Elias, el soldado más prometedor del Imperio y también su mayor opositor.
Laia es esclava, Elias es soldado. Ninguno de los dos es libre. Solo uniendo sus destinos podrían cambiar el de todos.
Este libro tenía varias características que llamaban mi atención y que sumaban muchas posibilidades de que me fuera a gustar bastante su historia: una distopía original ambientada en la Roma Antigua, con dos personajes aparentemente fuertes y con carácter. Esto sin mencionar la atrayente sinopsis y el peculiar título de la obra.
Al contar con dos protagonistas, la historia alterna los capítulos contados por ambas voces: por un lado, Laia nos cuenta su historia como académica en una Roma donde los que son como ella son odiados, esclavizados y asesinados sin piedad; y en contra partida tenemos la voz de Elias, un joven marcial sanguinario que no ha tenido una vida fácil y que no se siente cómodo en la Academia Militar Risco Negro ni tampoco se siente bien consigo mismo al realizar su trabajo.
Ambos personajes me han parecido bastante potentes, con mucho carácter dentro de sus virtudes y sus defectos. También me han resultado muy distintos y a la vez muy similares entre si. Tanto Laia como Elias buscan un fin: ella el de salvar a su hermano Darin y él salvarse de la opresión de Risco Negro, la tan ansiada libertad. Estos motivos les llevarán a tomar decisiones bastante difíciles, a jugarse la vida en más de una ocasión y a asumir las consecuencias que sus actos pueden tener tanto en ello como en otras personas de su alrededor.
Hacía tiempo que no me encontraba con unos personajes tan fuertes e increíbles como estos. Y es que me ha gustado descubrir que a pesar de sus virtudes, también tienen defectos; no son los típicos rebeldes valientes que actúan sin cabeza y aún así todo les sale bien. No. Al fin y al cabo no dejan de ser personas, dos chavales jóvenes que sienten miedo cuando deben de sentirlo, que se acobardan en situaciones en las que cualquier humano se acobardaría, pero que aún así... intentan seguir adelante y luchar para enmendar sus errores. Y lo más sorprendente es que cada uno de los personajes de esta historia tiene su propio genio y carácter.
Por otro lado, me he encontrado con una ambientación maravillosa. La trama se desarrolla en la ciudad de Serra, donde los habitantes se agrupan en académicos, marciales y tribales. Quienes tienen el poder son los marciales, personas salvajes y sin escrúpulos, asesinos a los que no les tiembla el pulso a la hora de matar a inocentes. Es una sociedad dividida y opresiva, donde los académicos y los tribales sufren la violencia de los marciales y donde la resistencia lucha por un futuro mejor. Pero donde también se esconde muchos secretos en ambos bandos, donde cada uno mira por sus propios beneficios y los pone por delante de cualquier vida humana que pueda estar en juego.
No es nada nuevo encontrar una sociedad dividida en una distopía, donde por un lado están lo buenos y por el otro los malos. Pero lo que realmente me ha sorprendido dentro de esta sociedad es descubrir cómo se sienten las personas que forman parte de ella, de los dos bandos opuestos; cómo a pesar de sus diferencias pueden llegar a tener un objetivo en común. Creo que esa es una pieza fundamental en la historia y la autora ha sabido muy bien cómo sacarle partido.
La trama cuenta con abundantes escenas de acción bastante violentas. Las violaciones y los azotes forman parte de los esclavos académicos dentro de Risco Negro; la rivalidad, la lucha y la sangre se respiran en cada espacio de la academia militar, y todo ello se palpa en la trama, ya que Sabaa Tahir no se corta ni un pelo a la hora de detallar hasta la más espeluznante escena de lucha. Otro punto más a favor de una historia tan formidable.
Otro aspecto que me ha gustado mucho de la trama es la diferencia cultural entre los académicos, los marciales y los tribales, a pesar de que estos últimos tengan algo menos de protagonismo. Aunque todos forman parte de la misma sociedad, cada uno tiene sus propias creencias, y la mezcla de realidad con, digamos, ese toque místico que le aportan los augures y otros seres fantásticos le da un toque aún más sorprendente y hasta gore a la historia.
Me ha encantado el estilo de Sabaa Tahir. Tiene una forma muy sencilla de narrar la historia y de que el lector se quede prendado de la misma sin que sea consciente de ello. Y como decía anteriormente, no le tiembla el pulso a la hora de describir escenas desagradables o de crear momentos de agonía y tensión entre los personajes de la historia. Todo un placer haberla descubierto, sin duda alguna.
El final del libro es tan impactante que, cuando terminas de leerlo, no das crédito a lo sucedido en tan pocas páginas. Se genera tal tensión en el desenlace final que llega a crear ansiedad al lector por averiguar de una vez por todas qué sucederá. Sin duda, un final memorable que deja muchas puertas abiertas para su continuación.
Una llama entre cenizas desprende fuerza, rivalidad, violencia, tensión y mucha sangre en cada una de sus páginas. Una ambientación asombrosa, una trama original que atrapa desde el comienzo de su historia y unos protagonistas inigualables que conseguirán que el lector devore esta historia de una sentada. Sin duda alguna, cien por cien recomendable.
Gracias a Montena.