Esta semana Somatoline, marca de farmacia que conoceréis de sobra por sus mítico anticelulítico nocturno, ampliaba su gama corporal con una curiosa máscara de barro. Este tratamiento de choque con un 95 % de ingredientes de origen natural se inspira en la "barroterapia" para combatir eficazmente la celulitis, reafirmar, estimular la circulación, depurar y drenar. Y todo gracias a una fórmula de color negro que se aplica sobre la zona a tratar y se deja actuar durante 20-30 minutos.
Somatoline Cosmetic Anticelulítico Máscara de Barro repite con su inconfundible tarro blanco y verde, pero en este caso se trata de la primera máscara corporal del mercado con una acción boost contra la celulitis. Hablamos de un tratamiento de choque que se utiliza 2-3 veces por semana y que promete resultados desde la primera aplicación. Además, cuenta con perfume 100 % natural gracias a los aceites esenciales de menta y patchoulí, para una aplicación digna del mejor SPA.
En su fórmula encontramos extracto de diente de león, conocido por su acción depurativa, arcilla negra que suaviza la piel desde la primera aplicación, escina drenante y extracto de arándano que activa la microcirculación y tiene poder antiinflamatorio.
Este barro anticelulítico cuenta con una textura cremosa que no gotea, para evitar los indeseados churretes durante la exposición. El tratamiento está pensado para depurar, drenar toxinas y lípidos, estimular la microcirculación, prevenir la formación de depósitos grasos, abrir los poros para facilitar la aplicación de otros tratamientos posteriores, reafirmar y alisar. Además, puede aplicarse de dos maneras diferentes según los resultados que deseemos.
1. Como tratamiento de choque 2-3 veces por semana para un efecto inmediato sobre la celulitis.
2. Una vez por semana si queremos una acción mantenimiento tras el tratamiento de choque.
En ambos casos se debe aplicar una ligera capa sobre las zonas a tratar realizando un pequeño masaje circular y dejándolo durante 20-30 minutos. Al poco tiempo el producto se habrá secado y podremos seguir con nuestra actividad cotidiana. Después, basta retirarlo con agua y listo.
Este nuevo tratamiento de Somatoline está a la venta en farmacias a un precio de 49,50 € y os juro que si lo pruebo os cuento los resultados. A priri me parece un producto súper interesante, pero soy una persona súper activa como para estar quieta durante 20-30 minutos. Seguramente en verano me animaré mucho más a utilizarlo porque ahora que hace frío me da más pereza.
¿Conocíais este tratamiento? ¿Qué os parece? ¿Lo compraríais?
Fotografías cortesía Somatoline.