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Una mirada hacia el Antiguo Egipto (I): Todo tiene un inicio.

Publicado el 15 octubre 2014 por Paullushistoricus @paullushistoric

Cuando alguien menciona Antiguo Egipto, la primera de las imágenes que nos viene a la cabeza son las pirámides, más en concreto las que corresponden a Keops, Kefrén y Micerinos, los faraones de la IV dinastía. Luego nos vienen las momias, como resultado de su práctica funeraria más conocida. Pero nada más lejos de la realidad, lo que conocemos como civilización egipcia va muchos más allá. Un largo período de tiempo desde sus orígenes aproximadamente en el V milenio a.C. en el territorio africano que abraza uno de los ríos más grandes del mundo, el Nilo.

Estoy haciendo un curso de egiptología online, de Coursera, altamente recomendable para cualquier interesado en el tema: no solo para los que quieran introducirse, también para aquellos con cierta base que quieran escuchar a 2 especialistas de la Universidad Autónoma de Barcelona (Quien quiera más datos que lo pida y le daré más referencias).

Antes de seguir avanzando, quisiera dejar claro que no pretendo hacer un resumen de la Historia de Egipto, ni del material que me proporcionan el curso, más bien iré recogiendo ideas que más me llamen la atención, curiosidades que nos vayan abriendo el apetito para saber más.

A la hora de acercarnos a una realidad histórica del pasado utilizamos una series de términos que nos ayudan a establecer una serie de categorías. Algunas de estas se basan en alguna cosa puntual del pasado, y otras establecidas por algunos teóricos posteriormente. Uno de los aspectos claves es por supuesto la cronología. En el antiguo Egipto nos encontramos una periodización basada en las dinastías, que no son más que diferentes secuencias de reyes- faraones que seguían un criterio en común. Estas se agrupaban a su vez en etapas, los reinos Antiguo, Medio y Nuevo, momentos en que predominaba cierta estabilidad, entre los que intercalaron periodos que no lo eran tanto, los intermedios, un poco como la dualidad, el orden y la destrucción. Estas etiquetas no dejan de ser controvertidas, ya que surgen desde un punto de vista que no es el nuestro, ni tampoco lo debió ser del suyo (me refiero a cualquier Egipcio de antaño), pero son imprescindibles para poder exponer y comprender de forma clara todo lo que nos ha llegado hasta nosotros.

Aunque fuera de forma parcial, en la civilización egipcia tuvieron una forma de registrar su historia: empezando principalmente por los faraones, y extendiéndose a otros sectores de la población. Las fuentes literarias son uno de los testimonios más destacados de la Antigüedad, a pesar de no conservarse en su totalidad. Aquí es donde entra el juego de la interpretación de estas. En este ámbito contamos con una figura primordial, Maneton un historiador y escritor del siglo III aC, que escribió Aegyptiaca una obra que recogía la historia de Egipto. Pero, ¿que se conserva del texto original? NADA¡¡¡ Lo que sabemos de él son los resúmenes (conocidos como epítomes) realizados por escritores de unos pocos siglos después, que se limitaban a las listas reales y poca información más. Luego también mencionaremos un pasaje recogido por Flavio Josefo sobre los Hicsos, un pueblo vinculado a los primeros judíos. Pero podemos hablar de algunos datos que si se pueden deducir. Se trató de una obra escrita en griego, en época Ptolemaica (tras la conquista de Alejandro Magno), y que tuvo acceso a fuentes que ya no se conservan.

Por otra parte la arqueología es otra de las fuentes de información bastante importante, y es que el legado cultural que nos ha llegado es imponente, y lo que nos queda. Aquí podemos llegar a otro punto conflictivo, ya que en muchas ocasiones el misterio nos juega malas pasadas, se nos deriva a una literatura más cercana a la ciencia ficción (incluso superándola). Ese es otro de los motivos por los que me he decidido iniciar esta serie de publicaciones sobre Egipto: no solo por gusto a la historia y al arte, sino que también difundir información correcta y motivar a la gente aprender. Pero poco a poco lo iremos viendo.

Para acabar, como ya sabéis todos que me encantan los enigmas, os propondré algo para que investiguéis y busquéis la respuesta.

Egypte_louvre_290

Autor/licencia: Jeff Dahl CC BY-SA 1.0

En el antiguo Egipto los faraones utilizaron diferentes títulos, este es uno de ellos y que además pertenece a un faraón en concreto, ¿Sabríais decir quien?

Por último os invito a todos a opinar y comentar sobre el tema, incluso a plantear dudas, y luego aconsejaros dos blogs donde podréis ir aprendiendo más cosas sobre el mundo egipcio. Por una parte Papirosperdidos, por dos motivos: sus interesantes post sobre varios temas, entre ellas la gran variedad de divinidades, y también por su conexión con la actualidad sobre el mundo egipcio y las recomendaciones. Por otra parte tenemos el blog Historiae2014, un espacio gestionado por una persona bajo el nombre de Heródoto (historia + historia a más no poder) que hace un repaso de las grandes épocas de la historia, y justamente está inmerso en la historia del antiguo Egipto.

Un saludo cordial¡¡¡


Una mirada hacia el Antiguo Egipto (I): Todo tiene un inicio.

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