Ayer 20 de mayo llegó a las carteleras UNA MUJER, UNA PISTOLA Y UNA TIENDA DE FIDEOS CHINOS, nueva obra del prestigioso director chino ZHANG YIMOU, autor de las exitosas Sorgo rojo, Vivir, Hero y La casa de las dagas voladoras.
20 años después de ver la película "Sangre fácil" de los hermanos Coen, con la que quedó profundamente marcado, Zhan Yimou
Wang es un hombre pesimista, astuto y avaricioso, dueño de un bar de tallarines en una ciudad situada en un paraje desértico de China. No hace caso de su esposa, una mujer de lengua viperina que tiene una aventura amorosa con Li, uno de los empleados de Wang. Li es un hombre tímido que, muy a pesar suyo, acaba guardando la pistola que su amante ha comprado para matar a su marido. Pero Wang está al tanto de todo lo que hacen. Soborna al agente de policía Zhang para matar a la pareja. Visto así, el plan es perfecto: todo se solucionará gracias a un final sangriento y cruel perfectamente satisfactorio para él. O al menos, eso piensa. Pero el malévolo Zhang tiene otra idea en la cabeza. Y según se complica la trama, correrá más sangre y la violencia será cada vez mayor