Doris May Tayler nació el 22 de octubre de 1919 en la localidad persa de Kemanshah. Su familia era británica pero su padre, un oficial del ejército, había sido trasladado a aquel territorio que hoy ocupa Irán. Alfred Tayler había sufrido la amputación de una pierna durante su participación en la Primera Guerra Mundial y se había casado con una de las enfermeras que habían cuidado de él, Emily McVeagh. Cuando Doris tenía seis años, sus padres decidieron empezar una nueva vida en el África colonial de donde les habían llegado ecos de promesas de una vida mejor. Así que se instalaron en Rodesia del Sur, una zona situada en la actual Zimbabue.
La infancia y juventud de Doris se movió entre dos extremos. Mientras su madre se empeñaba en hacer de su hija una mujer recta mediante una estricta educación, ella exprimía la vida con su hermano Harry en los extensos paisajes africanos. Emily no pudo sujetar por mucho tiempo a su hija. Tenía catorce años cuando Doris optó por abandonar el rígido colegio de monjas en el que estudiaba y con quince años decidió trabajar como niñera. A partir de entonces, su educación fue estrictamente autodidacta.
Doris Lessing no consiguió adaptarse a la vida de mujer casada y madre de tres hijos. Su prioridad era entonces escribir, algo que no pudo incorporar a su rutina diaria. Así que decidió dejarlo todo y en 1949 se marchó a Inglaterra a donde solamente se llevó a su hijo pequeño, mientras que John y Jean se quedaron con su padre. Poco después publicaba su primera novela, Canta la hierba.
Ya entonces Doris era una escritora reconocida. Pero fue en 1962 cuando su Cuaderno dorado, una novela con altas dosis de autobiografía, la que la consagró. La obra se convirtió también en un claro referente para los movimientos feministas del momento. Doris Lessing se dedicó los años siguientes en cuerpo y alma a la escritura mientras recibía el reconocimiento de la crítica y recibía un sinfín de premios literarios, hasta que le fue entregado el Nobel de Literatura, convirtiéndose en la décimo primera mujer en ser galardonada con él.