Una opinión cualificada

Publicado el 01 diciembre 2012 por Atandocabetes
De lo mucho que navega por internet, siempre encuentra uno opiniones que parecen interesantes y "relevantes" que demuestran que cuando uno piensa lo que escribe, lo que defiende y lo que siente, cualquier persona que quiera entender entiende. Como muestra, aquí os dejamos una reflexión que en estos tiempos que, de manera interesada, se intenta denostar la política y a los políticos con intereses torticeros, que pretenden deslegitimar la esencia de la democracia: un hombre, un voto. 
Evidentemente hablamos de política con mayúsculas, es decir, la política al servicio de los ciudadanos, de lo público y con una vocación de servicio que ha sido la identidad de la social democracia y de los Estados del Bienestar que han surgido en Europa después de la II Guerra Mundial. Esos mismos Estados Europeos que en la actualidad están dirigidos por una derecha empeñada en gobernar para unos pocos, y que están haciéndoselas pasar canutas a una inmensa mayoría social. 
Sin más, os dejamos con la opinión que Rafa Valdivia ha escrito en su blog personal:

"Llevo ya tiempo sin escribir nada porque he estado construyéndome. Sin embargo, hoy me ha impulsado a escribir la impotencia sentida al comprobar cómo un argumento muy peligroso está calando entre la gente: que los políticos no sirven para nada.
Y esto es en parte cierto. Los políticos ladrones, estafadores, cocainómanos, ignorantes, insensibles, minoristas, crueles, ricos, prepotentes y mentirosos, no sirven para nada. Pero el resto, que es la gran mayoría y la que no sale en televisión, sí.
Precisamente quienes no creen en la política, porque a través de ella no pueden acceder legítimamente al poder, nos intentan vender con burdos ejemplos que los políticos ya no son necesarios, que deberían ser técnicos quienes gobernaran el país, lo que los finos llaman una Tecnocracia. En otras palabras, una dictadura de no electos que gobiernan para sus propios intereses, que son justamente los contrarios a los de la mayoría, y sin la presión de ser ratificados o condenados cada cuatro años en unas elecciones democráticas. Ya lo decía Franco: “Haz como yo, no te metas en política.” Y mientras España se moría de hambre, él se gastaba miles de millones de pesetas en tanques y armamento…así es la “tecnocracia”.
¿Qué aportan los políticos a la democracia? El factor humano. Un tecnócrata sólo entiende de números, de estadísticas, de balances y de medias, y ya sabemos cuán injusta es una media: Si yo me como dos pollos y tú ninguno, la media nos dice que nos hemos comido un pollo cada uno. Le da igual subir los impuestos si con ello compensa el déficit, ignorando que habrá gente que lo pasará muy mal. El político pone cara a los números rojos, pone sentimiento a la estadística negativa y prioriza en función de la gente. Si hiciéramos un riguroso y objetivo estudio de viabilidad económica, como lo haría un técnico, ¿creéis que hubiera salido rentable hacer un Pabellón Polideportivo, un Centro Médico o un Estadio Municipal de Deportes como el que tenemos, para un pueblo de poco más de 7500 habitantes?
Pero incluso en su virtud está el defecto. El factor humano puede ser benigno, pero también maligno. El mayor problema, yo creo, es cuando el político se “tecnocratiza”, que es precisamente lo que está ocurriendo ahora. ¿Por qué? Porque nunca fueron políticos, porque solo con mentiras y falsos trajes de políticos defendieron los intereses de la mayoría para poder acceder al poder. Y cuando lo hicieron, se tecnocratizaron para defender los intereses de la misma minoría rica y estafadora de siempre: los bancos, las grandes fortunas, las sectas religiosas y las grandes empresas que están deseando comerse lo público.
Y son precisamente ellos quienes nos ponen en su tablero de juego, para que “vestidos” de políticos nos hagan aborrecer con sus “políticas” de recortes suicidas y asifixiantes precisamente eso, la política. ¿Para qué? Para que cuando estemos convencidos de que la política y los políticos no sirven para nada, no tengan que volver a tener que engañarnos otra vez y pasar el maltrago de unas elecciones democráticas con sufragio universal, donde el voto de Botín el banquero valga lo mismo que el de Pepín el carnicero.
¿Vas a caer en su juego? Es hora de hacer POLÍTICA."
www.rafavaldivia.wordpress.com   Pd. Pronto, "Lo que no debe ser la política"