Cuando inició el periodo industrial, los trabajadores dejaron de ser dueños de su trabajo y empezaron a ser denominados “mano de obra” por lo cual pasan a ser trabajadores que cobran una retribución por su labor, esto dio lugar a la división de trabajo, en donde la población aumenta, se incrementan más horas de trabajo, y hay una disminución laboral lo que provoca que para vivir como querían vivir tenía que trabajar toda la familia, y si no querían tener un buen nivel económico o si se conformaban con lo poco que adquirían entonces no se esforzaban lo suficiente para mejorar su calidad de vida.
El trabajador vive las veinticuatro horas del día interactuando con el medio que los rodea, trabaja ocho horas y quizás comparte dieciséis horas con su familia. La vida no se desperdicia trabajando, la vida se desperdicia cuando no amas tu trabajo, cuando buscas trabajar solo para pagar las cuentas, las cuotas de la casa, el colegio de tus hijos, y si trabajas para eso, trabajarás la mayor parte del día y no existirá tiempo para pensar, ni para formar un pensamiento crítico, ni para disfrutar de los pequeños placeres que necesitas para sentirte “vivo”
Sí, lo sabemos, somos esclavos del sistema además unos trabajan por una miseria de salario y de esa miseria quieren gastar en lo que no les alcanza, siempre se exige rendir más y los empresarios pagan menos, si eso sucede entonces no trabajes, busca otro trabajo, mejora tu calidad de vida, ya que no solo de amor vive el hombre, siempre necesitamos esa estabilidad económica que nos haga sentir seguros e independientes, estamos condenados a pasar el resto de la vida trabajando para sobrevivir.
Que te paguen cien dólares mensuales por escribir te harán feliz si amas la escritura, si no necesitas un televisor, si no quieres un buen viaje, si no quieres vestirte a la moda, eso está bien. Que te paguen mil dólares mensuales por esforzarte física y mentalmente ocho horas diarias, cinco días a la semana y teniendo vacaciones quince días al año también está bien, pero recuerda: “que no se te vaya la vida tratando de ganarla”, sabemos que el ser humano no es solo un trabajador y consumidor, sino que también es un individuo civil, y quiere vivir como persona expresiva y como sujeto de integración cultural, dividiendo su tiempo entre: lo personal, lo civil y lo productivo.
**Trabaja para vivir y no vivas para trabajar.