Raziel
47 años.
México.
Fue del 2008 al 2011 cuando tuve mi primera y única relación virtual estaba pasando por un momento difícil en mi matrimonio, discutía mucho con mi esposa, un amigo comento un día que había conocido a una chica en el Messenger, en ese momento pensé que seria bueno conocer a alguna chica también, no tenia la intención de iniciar una relación, solo platicar y pasar el rato para olvidarme de los problemas.
Desde ahí conocí un chat 3D, el cual me impresiono, ya que podía interactuar a las personas usando el avatar, por lo que empecé a conocer gente, tanto hombres como mujeres, había pasado como mes y medio cuando conocí a la que sería mi novia más adelante.
Platicamos, congeniamos y sin darnos cuenta estábamos dándonos faje como se dice en México, cada vez que nos veíamos queríamos estar así, aunque al irnos conociendo el sexo virtual paso a segundo plano, descubrimos que teníamos muchas cosas en común, entre otras, también era casada y no pasaba un buen momento en su matrimonio.
Nos dimos cuenta que podíamos conectar nuestro sentir a pesar de la pantalla, a los 15 días habíamos pasado de ser amigos a novios virtuales.
Estuvimos casi tres años juntos, se fue saliendo de la pantalla, del chat pasamos a Messenger, de eso a las llamadas telefónicas, nos mandábamos fotos por correo, tuvimos sexo telefónico, vivíamos relativamente cerca, sin embargo, no nos conocimos físicamente, a ella le preocupaban sus hijos, en ese momento yo aún no tenía hijos, así que había pensado en divorciarme y estar con ella, se lo propuse, pero sus hijos eran pequeños y ella no quería que vivieran lejos de su padre.
Ella llegó a tener una mejor relación con su esposo, terminamos para que pudiera llevar bien su matrimonio.
Después que nos dejamos yo le busqué años después, solo platicamos aquella vez. Hace pocos meses ella me buscó, estuvimos a punto de regresar virtualmente solo que no quiere poner en riesgo su matrimonio al igual que yo. Ahora tengo dos hijas, tuve a la primera un año después de terminar mi relación a distancia, lo que hizo que cambiara mi matrimonio para mejor, tuvimos otra hija, de eso ya más de tres años.
Sin embargo, ahora me siento como entonces, peleo mucho con mi mujer, por el bien de ellas, mi esposa y yo hemos decidido seguir con el matrimonio. A pesar de eso, aun siento que me falta algo, sé que algún día estaré junto a la mujer que conocí a distancia, no hemos podido olvidarnos, aunque seamos viejos se que podremos estar juntos porque nuestra relación dejo marca en ambos.