La naturaleza nos obsequia a veces con espectáculos de indescriptible singularidad. Algo de esto sucede en la Laguna de Fuente de Piedra, en la provincia de Málaga.
Esta valiosa reserva natural está rodeada por suaves lomas, relieves montañosos de mediana altura sembrados de campos de olivos y cereales que dominan las proximidades de las aguas, proporcionando al conjunto una gran belleza paisajística.
Su extensión es de seis kilómetros de largo por casi tres de ancho. Una de sus curiosidades es que es el único lugar del Mediterráneo Occidental donde se reproduce el flamenco rosado de manera estable.
Los flamencos rosas empiezan a llegar a partir de febrero y en los meses de primavera y verano inician la agitada tarea de la reproducción. Para ello buscan los lugares más idóneos, próximos casi siempre a las orillas de la laguna.
Aprovechando las elevadas precipitaciones registradas en la zona durante el otoño e invierno pasados, en estas fechas la laguna presenta un elevado nivel de agua y acoge una gran diversidad y abundancia de aves acuáticas que se encuentran en pleno periodo reproductor lo que constituye un espectáculo increíble para sus visitantes. (El Mundo)