Una sonrisa tras el mostrador

Por Hatter @LaSombrereria

El protagonista de este blog es el Sombrero, con esa finalidad se creó y así debe continuar. Digo esto de forma tan rotunda para mentalizarme y no cambiar mi rumbo, aunque a veces tenga razones para desviarme de ello.
Cuando pienso en las próximas entradas del blog se me vienen a la cabeza cantidad de temas sobre los que hablar y opinar, muchos relacionados con el oficio, pero otros muchos con temas de actualidad que nos afectan directamente. Pero me tengo que frenar y preguntarme si esto tiene sitio aquí, en un blog de Sombreros. La respuesta es clara: ¡NO! No puedo y no debo variar, ni despistarme, por muchas ganas que tenga de hacerlo en ocasiones.
Aunque el tema de hoy sí puede entrar, ya que es parte de un negocio, de nuestra Sombrerería.
Por suerte es bastante habitual escuchar en Sombrerería Albiñana un halago por la amabilidad con la que han sido atendidos los clientes. Una frase de reconocimiento que aunque pueda parecer sin importancia, es muy gratificante para nosotros.
Este hecho de que te feliciten por la buena atención, no es ni mucho menos exclusivo de Albiñana; en el pequeño comercio o ahora llamado “comercio urbano”, es muy habitual. No seré yo el que  tenga que enumerarles las bondades y virtudes de comprar en el pequeño comercio, ya que seguramente ustedes lo habrán descubierto hace mucho tiempo por propia experiencia.

Es esa experiencia agradable, la del trato y el respeto, la que hace que un cliente regrese a tu tienda, y si además viene acompañada de un producto de calidad y un conocimiento profundo sobre el artículo, convertirá  la compra en un acto muy gratificante.

Yo no sé si en Albiñana encontrará el producto que necesita, no sé si el precio estará ajustado a su presupuesto, pero lo que sí sé, y lo que le puedo asegurar es que encontrará una sonrisa detrás del mostrador cuando entre en nuestras tiendas. Después veremos si le podemos satisfacer en su petición, pero la sonrisa, se la aseguramos.

Con esta filosofía llevamos trabajando desde siempre, por ello cuando alguien nos dice “qué amables han sido”, es una certificación de que el trabajo sigue haciéndose bien, o al menos así lo intentamos.
Ya ven, hoy cambiamos los Sombreros por Sonrisas…

Visto en: Sombrerería Albiñana