La semana pasada asistí invitada al Club de Lectura de la Biblioteca Municipal Joan de Timoneda. No la conocía y me encantó la entrañable alquería del barrio de Beniferri, recuperada para uso cultural por el Ayuntamiento. Se trata de construcciones rurales, típicas de la huerta de Valencia; un patrimonio etnográfico que no debemos dejar perder.Encantada de charlar con los lectores sobre mi novela DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN. Muchos de ellos era la primera vez que se acercaban a la narrativa romántica, siempre hay tiempo para la curiosidad lectora y conocer otras formas de narrar.Mi gracias especial a Carmen, por la merienda a la valenciana, con coca de llanda, coca de tonyina y mistela ya Teresa por ejercer de moderadora de la reunión.