Título: Una vacante imprevista.
Autor: J.K. Rowling.
Idioma: Español.
Editorial: Salamandra.
Nº de páginas: 608 páginas.
ISBN: 9788498384925
La historia de esta primera obra de Rowling para adultos se centra en Pagford, un imaginario pueblecito del sudoeste de Inglaterra donde la súbita muerte de un concejal desata una feroz pugna entre las fuerzas vivas del pueblo para hacerse con el puesto del fallido, con factor clave para revolver un antiguo litigio territorial.
La minuciosa descripción de las virtudes y miserias de los personajes conforman un microcosmos tan intenso como revelador de los obstáculos que lastran cualquier proyecto de convivencia y al mismo tiempo dibujan un divertido y polifacético muestrario de la infinita variedad del género humano. Sin que el lector apenas lo perciba, Rowling consigue involucrar en temas de profundo calado mientras lo conduce sin pausa a un sorprendente desenlace.
“Una vacante imprevista” es la primera novela de J.K. Rowling fuera de las aventuras del famoso Harry Potter. Es un libro que posiblemente no enganche desde el principio, tienes que sumergirte en sus páginas y en sus intrigas para que puedas encontrar un aliciente para seguirlo. ¡Y no defrauda en absoluto! La mujer que nos cautivó con historias de magia también lo consigue con la pura realidad.
Reconozco que sentí miedo al principio porque había escuchado críticas negativas hacia el libro, pero creo que posiblemente fueron de personas que no supieron cómo enfocar este libro o simplemente que para gustos hay colores. Es un error leer este libro como si fuera un cuento de niños porque está muy lejos de serlo, a mi parecer.
No hay ninguna similitud entre la saga más popular de esta autora y este libro individual que cautiva a medida que se avanza. Quizá lo único que tengan en común es que transcurren en un pueblecito, pero más allá de eso no existe nada que los relacione y así es como debe tomarse el lector esta historia.
Pagford podría convertirse en el típico pueblo soñado, donde añoras poder vivir algún día y que debido a sus disputas te puede llegar a desagradar. La descripción del mismo es precisa, dejándonos entrever que la autora tenía una idea muy concebida del mismo y que no ha dudado en plasmar con palabras para que nuestra imaginación vuele.
El inicio de este libro nos muestra una muerte sorpresa dejando a todos los personajes en estado de shock. A partir de ahí, parece que todo gira en torno a esa vacante que ha quedado libre, pero poco a poco el interés acaba cambiando de objetivo y se centra en varios al mismo tiempo. La vida de cada habitante del pueblo, sus ideales, esperanzas, sueños, tristezas y todo se amarga con cada acción.
La autora nos muestra temas reales, que están a la orden del día como puede ser el maltrato, la pobreza, la discriminación, el robo y en definitiva todos esos males que no siempre se ven y que por desgracia están ahí. Cada personaje tiene algo especial, que te hará quererlo o más bien odiarlo a partes iguales y sería imposible olvidarse de personas como Andrew, Samantha, Howard, Kristal, Stu o Parminder.
Todos los habitantes de Pagford abren sus puertas al lector para que se introduzca en la historia, pero también en sus vidas familiares para que vea la precariedad o la opulencia de cada uno de ellos. Y como fondo, la disputa sobre el barrio más pobre de todos y que parece que no tiene cabida en ningún sitio.
El final me ha dejado impresionada, encogiéndome el corazón desde los últimos capítulos y dejándome una sensación extraña en el cuerpo. Y aún así, el final ha sido demasiado brusco porque se ha cerrado
abruptamente y nos deja con la duda de lo que podría pasar con muchos personajes que no aparecieron. Pero ha sido un final inesperado y justamente eso es lo que se busca en un libro: que nunca sepas qué vas a encontrar al pasar la página.
J.K. Rowling ha conseguido una novela muy lograda alejada del género que acostumbra, donde las escenas más subidas pueden estar más o menos bien escritas, pero donde lo que realmente importa son los temas que tratan desde el minuto uno. Recomendable para todos los lectores, pero siempre con la mano abierta y dejando a Harry Potter en la mesilla.